30 Julio 2013
NUEVAS INSTALACIONES. El comedor de la Casa Rosada tiene capacidad para unos 100 comensales. FOTO TOMADA DE INFOBAE.COM
BUENOS AIRES.- La presidenta Cristina Fernández inauguró hoy el nuevo comedor de la Casa de Gobierno, al almorzar acompañada de varios de sus principales funcionarios, mientras que en las mesas restantes se ubicaron voceros y empleados de Balcarce 50. El dato curioso es que en el comedor de la Casa Rosada no hay falsas promociones que ocultan datos esenciales en letra chica ni asteriscos que advierten con sutileza sobre el incremento de la cuenta; en la sede gubernamental se puede almorzar por sólo $ 3.
La jefa de Estado estuvo acompañada por el secretario Oscar Parrilli, el asistente personal Pablo Barreiro, el jefe de gabinete Juan Manuel Abal Medina, el vocero Alfredo Scoccimarro y el secretario de Legal y Técnica Carlos Zanini.
Los periodistas acreditados pudieron ingresar a un sector del flamante comedor y ubicarse a escasos metros de la mesa presidencial, para poder seguir el devenir gastronómico de Cristina y sus principales colaboradores.
En ese contexto, no causó pocos comentarios apreciar que la mandataria, sin titubear, mojara el pan en la ensalada tricolor del primer plato, compuesta de zanahoria, lechuga y remolacha.
Los restantes mesas, también de color blanco al igual que las sillas, fueron totalmente ocupadas, por unos 50 empleados de la Casa que comían el mismo plato presidencial y hablaban por lo bajo.
Antes del segundo plato -pollo con zanahorias al vapor-, la Presidenta le dio una indicación a Barreiro, quien dejó el comedor. En ese momento, Scoccimarro, falto de reflejos, tuvo que recibir el pedido presidencial de que no le dejara la silla vacía a su lado, a lo que accedió de un salto.
Mientras, los mozos circulaban por la veintena de mesas, aunque con especial énfasis en la ubicada en el centro, con la mesa chica del Gobierno allí instalada, y los empleados, atentos, sintonizaron los dos televisores pantalla plana del lugar en la Televisión Pública.
Luego del segundo plato, en lugar del apic de frutas anunciado en el menú, pidió un te, y unos instantes después, dio por terminado el almuerzo, el que fue saldado por Zannini "en un gesto histórico que formará parte de la próxima campaña" según anunció la propia Presidenta.
El nuevo comedor, al igual que el anterior, también ubicado en el segundo piso de la Casa de Gobierno, sigue costando simbólicos $ 3 -lo mismo que en 2001-, por lo que Zanini pagó los $ 18 con un billete de $ 50, según pudo apreciarse.
Antes de retirarse, la jefa de Estado realizó breves declaraciones, en las que destacó que haya "un comedor como se merecían" quienes allí trabajan, y destacó la "hidroponía" sobre una de las paredes, y los cuadros allí instalados. Para elogiarlo, dijo que "parece un restaurant comercial" y ponderó la seguridad alimentaria de la cocina, y que se "respetó parte de la arquitectura original", mientras los restantes empleados se agolpaban sobre el ingreso al lugar, para ver a la Presidenta, que rara vez se presenta en el segundo nivel de Balcarce 50.
Luego, se trasladó por el piso superior, donde fue aplaudida dos veces por los empleados, y se sacó numerosas fotos, siempre ante la atenta mirada de los voceros y de Abal Medina. Tras unos minutos, dijo "Ay, qué frío que hace" y los encargados de seguridad la abrieron paso para que se retire. (DyN)