A 150 años de la muerte del hombre que pintó la libertad

En la mano derecha, la tricolor. En la izquierda, el arma. Eugène Delacroix pintó la encarnación descalza de la libertad después de la revolución de julio de 1789 en París. La obra fue controvertida. Fue interpretada como un llamamiento al levantamiento popular y durante años no se expuso. Sin embargo, "La libertad guiando al pueblo" es hoy una de las obras más importantes de la colección del Louvre. Sólo la Mona Lisa supera a la Marianne de los pechos descubiertos.

Delacroix, que murió el 13 de agosto de 1863 a los 65 años, fue uno de los románticos más importantes de su época. Pintó alrededor de 800 cuadros. En el 150° aniversario de su muerte, una exposición en París recuerda que Delacroix abrazó con la misma pasión el pincel que la pluma. "Hace falta algo de obstinación. Pero acabo de empezar y escribir me resulta tan fácil como pintar. Y lo que es muy peculiar: no tengo que revisar lo hecho tantas veces", escribió el pintor el 21 de julio de 1850.

"Delacroix écrivain" (algo así como: Delacroix escritor) es el título de la muestra que permanecerá abierta hasta el 6 de octubre y que le dedica el museo que lleva su nombre en París, según informa la agencia DPA.

Se expone, además de sus libretas de anotaciones, dibujos, autógrafos y fotografías. Delacroix fue uno de los pintores que más se interesó por la fotografía en el momento de su nacimiento, así como por la escritura.

Vivacidad, imaginación, extravagancia y pasión: Delacroix fue uno de los artistas más importantes del siglo XIX. La muerte y la lucha formaban parte de sus motivos favoritos. Y el rojo brillante y el verde saturado, de sus colores preferidos. Sus atrapantes temas lo convirtieron en una de las figuras claves del romanticismo francés. Y su generoso manejo del color en un precursor del impresionismo.