19 Agosto 2013
LA BARRA A PLENO. Así se celebró la victoria de Class Lancer. Desafíos más importantes esperan al pupilo de Jorge Guerra.
Otra demostración de gran calidad dio el veterano Class Lancer. El hijo de Sekari -que se cuida en el campo, a pocos kilómetros del hipódromo- completó en los últimos tiempos una seguidilla de tres victorias consecutivas con el sello de su endiablada velocidad.
El pupilo de Jorge Guerra tiene una sola marcha. Larga con los de la punta, los acompaña habitualmente hasta el palo del kilómetro y antes de volcar el codo, le gusta afirmarse sobre los palos y continuar su viaje hasta el disco acelerando la marcha, demoliendo a sus rivales.
Ayer Class Lancer consiguió un triunfo calcado de su anterior entrega. Lo suyo fue casi un monólogo en el Especial "Dr. Antonio V. Bolllea" (1.500 metros). Con breves parciales se sacó de encima al porteño Adverse y luego a Indian Surge, para cruzar la meta con ocho largos de ventaja empleando 1'31"3/5.
Es evidente que las carreras cortas y de medio fondo ya le están quedando chicas al zaino de siete años, cuyos directores están pensando seriamente en buscarle el "fondo" para intentar la hazaña que lograron tiempo atrás otros caballos veloces, pero valientes, que no se achicaron cuando debieron afrontar desafíos más duros como el Batalla de Tucumán, de 2.200 metros.
La calidad de Class Lancer y su asombrosa campaña hacen pensar que bien se merece el caballo una oportunidad como la de enfrentar el gran clásico de septiembre.
Casi en tiempo récord
El porteño Mogur, del stud tucumano El Dictador, asombró a última hora con una victoria contundente en su debut. El hijo de Slew Gin Fizz, de sólo 4 años y con dos victorias en Buenos Aires, ganó por 7 cuerpos, con lujo final, nada menos que en 1'17"2/5, apenas un quinto más que el récord que mantiene el gran Nazireo desde 1971. El nuevo pupilo de Roberto Medina, sin dudas, está llamado a cumplir una campaña sobresaliente en la pista local.
Por otro lado, dejó una impresión notable el potrillo santiagueño Dearqeet, del stud Tramo 20, con un triunfo por 15 cuerpos en el sexto turno. Es un hijo de Jump Star, uno de los padrillos que son revelaciones en los circos máximos en esta temporada. La demostración del alazán alienta su participación en la próxima Polla de Potrillos del 24 de septiembre, donde seguramente será protagonista.
El pupilo de Jorge Guerra tiene una sola marcha. Larga con los de la punta, los acompaña habitualmente hasta el palo del kilómetro y antes de volcar el codo, le gusta afirmarse sobre los palos y continuar su viaje hasta el disco acelerando la marcha, demoliendo a sus rivales.
Ayer Class Lancer consiguió un triunfo calcado de su anterior entrega. Lo suyo fue casi un monólogo en el Especial "Dr. Antonio V. Bolllea" (1.500 metros). Con breves parciales se sacó de encima al porteño Adverse y luego a Indian Surge, para cruzar la meta con ocho largos de ventaja empleando 1'31"3/5.
Es evidente que las carreras cortas y de medio fondo ya le están quedando chicas al zaino de siete años, cuyos directores están pensando seriamente en buscarle el "fondo" para intentar la hazaña que lograron tiempo atrás otros caballos veloces, pero valientes, que no se achicaron cuando debieron afrontar desafíos más duros como el Batalla de Tucumán, de 2.200 metros.
La calidad de Class Lancer y su asombrosa campaña hacen pensar que bien se merece el caballo una oportunidad como la de enfrentar el gran clásico de septiembre.
Casi en tiempo récord
El porteño Mogur, del stud tucumano El Dictador, asombró a última hora con una victoria contundente en su debut. El hijo de Slew Gin Fizz, de sólo 4 años y con dos victorias en Buenos Aires, ganó por 7 cuerpos, con lujo final, nada menos que en 1'17"2/5, apenas un quinto más que el récord que mantiene el gran Nazireo desde 1971. El nuevo pupilo de Roberto Medina, sin dudas, está llamado a cumplir una campaña sobresaliente en la pista local.
Por otro lado, dejó una impresión notable el potrillo santiagueño Dearqeet, del stud Tramo 20, con un triunfo por 15 cuerpos en el sexto turno. Es un hijo de Jump Star, uno de los padrillos que son revelaciones en los circos máximos en esta temporada. La demostración del alazán alienta su participación en la próxima Polla de Potrillos del 24 de septiembre, donde seguramente será protagonista.