28 Noviembre 2013
ALTERNATIVAS. Con la baja de Santiago Rocchia, Juan Martín Guerineau se plantea como opción para la segunda línea. El seleccionado partirá esta noche hacia Rosario, donde el sábado jugará la final a las 18.
Ni siquiera una práctica hecha y derecha había llegado a tener ese prototipo llamado Invitación Tucumán cuando debió enfrentar en Universitario al gigante Pampas XV, listo ya para embarcar hacia la Vodacom Cup. Pese a la resistencia tucumana en el primer tiempo, el seleccionado nacional fue una tromba y se impuso con un elocuente 50 a 5.
Ese sábado de febrero marcó dos cosas: primero, el regreso de Alejandro Molinuevo a la conducción técnica de la "naranja". Y la última derrota antes de comenzar una racha de victorias que se ha extendido hasta estos días.
Después de aquel primer compromiso veraniego, Tucumán ganó todo lo que jugó. Primero fue Huirapuca, al que venció 25 a 19 en su sexagésimo aniversario. Luego pasaron los amistosos contra Salta (35-20), Jaguares (18-0) y San Juan (38-22). Posteriormente, como antesala, los vencidos fueron Universitario (31-14) y Lawn Tennis (40-17) en el torneo del "Mocho Palou". Por último, ya en el Argentino, derrotó a Alto Valle (56-6), Córdoba (10-9), Salta (48-12) y Buenos Aires (25-18).
Una racha de 11 triunfos consecutivos bien podría servir como motivador para ir en busca de la docena en la final del sábado, contra Rosario. Al respecto, hay opiniones encontradas en el plantel.
"No creo que pese. Todo lo hecho anteriormente queda atrás. Siempre el partido más importante es el que viene, y este es el partido que hay que ganar", arengó Diego Vidal.
"Esta racha de partidos ganados le da confianza al grupo, pero hay que seguir trabajando con la misma humildad. Debe empujarnos a seguir corrigiendo detalles, a bajar la cantidad de errores no forzados y tratar de conservar la pelota lo más que podamos", propuso el fullbackAndrés Chavanne.
"No me había puesto a pensarlo. Lo que pasa es que nosotros vamos partido a partido y no nos ponemos a pensar en lo que dejamos atrás ni lo que va a venir después del siguiente partido. ¿Así que llevamos 11? Bueno, vamos por la 12 entonces", aportó Roberto Tejerizo.
Ahora bien, la cuestión es por qué el equipo logró encadenar tantos triunfos. "Caco" Molinuevo lo sabe: "por su prestigio, Tucumán está obligado a ser competitivo, a ser protagonista. Dicho más simple, Tucumán no juega amistosos. Y si logró ganar todos esos partidos se debe justamente a eso, a que se hizo carne ese pensamiento. No sólo en los hinchas, sino en cada jugador que se pone esa camiseta que lo distingue para siempre".
Ese sábado de febrero marcó dos cosas: primero, el regreso de Alejandro Molinuevo a la conducción técnica de la "naranja". Y la última derrota antes de comenzar una racha de victorias que se ha extendido hasta estos días.
Después de aquel primer compromiso veraniego, Tucumán ganó todo lo que jugó. Primero fue Huirapuca, al que venció 25 a 19 en su sexagésimo aniversario. Luego pasaron los amistosos contra Salta (35-20), Jaguares (18-0) y San Juan (38-22). Posteriormente, como antesala, los vencidos fueron Universitario (31-14) y Lawn Tennis (40-17) en el torneo del "Mocho Palou". Por último, ya en el Argentino, derrotó a Alto Valle (56-6), Córdoba (10-9), Salta (48-12) y Buenos Aires (25-18).
Una racha de 11 triunfos consecutivos bien podría servir como motivador para ir en busca de la docena en la final del sábado, contra Rosario. Al respecto, hay opiniones encontradas en el plantel.
"No creo que pese. Todo lo hecho anteriormente queda atrás. Siempre el partido más importante es el que viene, y este es el partido que hay que ganar", arengó Diego Vidal.
"Esta racha de partidos ganados le da confianza al grupo, pero hay que seguir trabajando con la misma humildad. Debe empujarnos a seguir corrigiendo detalles, a bajar la cantidad de errores no forzados y tratar de conservar la pelota lo más que podamos", propuso el fullbackAndrés Chavanne.
"No me había puesto a pensarlo. Lo que pasa es que nosotros vamos partido a partido y no nos ponemos a pensar en lo que dejamos atrás ni lo que va a venir después del siguiente partido. ¿Así que llevamos 11? Bueno, vamos por la 12 entonces", aportó Roberto Tejerizo.
Ahora bien, la cuestión es por qué el equipo logró encadenar tantos triunfos. "Caco" Molinuevo lo sabe: "por su prestigio, Tucumán está obligado a ser competitivo, a ser protagonista. Dicho más simple, Tucumán no juega amistosos. Y si logró ganar todos esos partidos se debe justamente a eso, a que se hizo carne ese pensamiento. No sólo en los hinchas, sino en cada jugador que se pone esa camiseta que lo distingue para siempre".
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