09 Diciembre 2013
Policías tucumanos protestan y piden un sueldo de $12.000
El conflicto policial por salarios que comenzó en Córdoba, y que derivó en saqueos y hasta muertos, se extendió a otras provincias, entre ellas Catamarca, donde policías se enfrentaron el viernes a tiros con Gendarmería Nacional, cuando la fuerza intentó desalojar una protesta frente a la Casa de Gobierno y se registraron heridos.
EN CHILE AL 1.800. Varios agentes del orden de Tucumán se concentraron para reclamar por un sueldo similar al de sus pares de Córdoba. la gaceta / foto de diego araoz
Mientras varios gobiernos provinciales, con apoyo de la Nación, coordinaban ayer fuerzas para detener “el efecto repetición” en conflictos salariales con las policías de distintos distritos, anoche, poco antes de las 22, más de un centenar de policías de Tucumán iniciaban un reclamo en la Subjetaura de esa fuerza, en Chile al 1.800, en esta Capital. Desde el Poder Ejecutivo minimizaron la protesta, deslizaron que había móviles políticos en la movilización y que esta situación nada tiene que ver con lo que pasó en Córdoba.
Algunos de los agentes llegaban al lugar acompañados por sus esposas e hijos, para reclamar una recomposición salarial que consiste en un sueldo de $ 12.000, similar al que lograron los policías de Córdoba.
Los agentes intentarán mantener una reunión con las autoridades para realizar una presentación, en la que además solicitarían mejoras laborales como la aplicación de un mejor régimen laboral y un recorte de las extensas recargas horarias. Además, piden por la reincorporación de los policías cesanteados en abril, que son Diego Herrera, Ángel Chaile y el comisario Miguel Toledo.
Los agentes dijeron a LA GACETA que no abandonarán este puesto de lucha, hasta que no se alcancen las mejoras solicitadas de parte de las autoridades del Gobierno tucumano.
Puntos de tensión
Por otra parte, en las provincias Santa Fe, Entre Ríos y Río Negro, se produjeron intentos de concentraciones, luego del autoacuartelamiento de los uniformados cordobeses -que generó una ola de violencia, saqueos, detenidos, heridos y hasta dos muertos-, policías de otras provincias imitaron el reclamo por mejoras salariales, lo que generó un estado de tensión ante la posibilidad de hechos de violencia.
Aunque en los últimos días se llegó aun acuerdo con los efectivos de San Juan, Catamarca, Chubut y La Rioja, y las conversaciones para llegar a un acuerdo con las fuerzas de Neuquén terminaron bien ayer al mediodía, el conflicto continuaba abierto en Entre Ríos, Santa Fe y Río Negro.
Frente el autoacuartelamiento de las fuerzas de seguridad provinciales, el Gobierno nacional puso al frente de la gestión al secretario de Seguridad, Sergio Berni, y dispuso el envío de gendarmes a distintos puntos de conflicto para evitar que se generen hechos de vandalismo.
En ese marco, gobernadores kirchneristas como Daniel Scioli y Martín Buzzi se apuraron este fin de semana a anunciar aumentos y pago de adicionales adeudados para evitar conflictos. A ellos se sumó ayer el gobierno de Misiones, que dispuso el pago de horas extras adeudadas a los efectivos de la policía. Una situación similar se dio en Chaco, donde el gobernador Juan Carlos Bacileff Ivanoff anunció que a partir de hoy se regularizarán los pagos de servicios adicional y remarcó que se incorporarán 1.200 nuevos agentes a la fuerza de seguridad y al Servicio Penitenciario.
En Entre Ríos, los uniformados le reclamaron al gobernador kirchnerista, Sergio Urribarri que presente una propuesta de aumento salarial y otras mejoras, y señalaron que de lo contrario volverán a movilizarse. Desde el Gobierno no hubo información sobre la situación, pero fuentes policiales dijeron que se trabajaba en un anuncio de aumento para esta semana.
Sin embargo, el conflicto seguía latente en otras zonas como Rosario, donde familiares de policías y el gremio en formación, Apropol, mantenían sus reclamos con una protesta en la puerta de la jefatura de la Unidad Regional II. Además, en la ciudad de Santa Fe agentes autoconvocados cortaron el sábado el tránsito sobre una calle frente a la sede de la Patrulla de Intervención Urbana, a metros de la autopista que va a Rosario.
Volatilidad
En tanto, el ministro de Seguridad de Mendoza, Carlos Aranda, se reunirá hoy con el titular de la Asociación Mutual del Personal Policial (Amuppol), Omar Alcalde, para acercar posiciones respecto de una mejora salarial y disuadir así una eventual protesta.
En Neuquén, los efectivos evaluaban ayer al mediodía la nueva oferta salarial de $ 10.000 para el sueldo básico acercada por el Gobierno, que comenzó a descomprimir el conflicto y terminó con un acuerdo firmado (Ver “Sapag logró...”).
En Río Negro, las autoridades y los uniformados buscaban anoche destrabar el conflicto, según informó el gobierno provincial.
Mientras tanto, agentes de Gendarmería nacional comenzaron a patrullar las calles de la ciudad rionegrina de San Carlos de Bariloche, donde los policías provinciales realizaban protestas. (DyN)
Algunos de los agentes llegaban al lugar acompañados por sus esposas e hijos, para reclamar una recomposición salarial que consiste en un sueldo de $ 12.000, similar al que lograron los policías de Córdoba.
Los agentes intentarán mantener una reunión con las autoridades para realizar una presentación, en la que además solicitarían mejoras laborales como la aplicación de un mejor régimen laboral y un recorte de las extensas recargas horarias. Además, piden por la reincorporación de los policías cesanteados en abril, que son Diego Herrera, Ángel Chaile y el comisario Miguel Toledo.
Los agentes dijeron a LA GACETA que no abandonarán este puesto de lucha, hasta que no se alcancen las mejoras solicitadas de parte de las autoridades del Gobierno tucumano.
Puntos de tensión
Por otra parte, en las provincias Santa Fe, Entre Ríos y Río Negro, se produjeron intentos de concentraciones, luego del autoacuartelamiento de los uniformados cordobeses -que generó una ola de violencia, saqueos, detenidos, heridos y hasta dos muertos-, policías de otras provincias imitaron el reclamo por mejoras salariales, lo que generó un estado de tensión ante la posibilidad de hechos de violencia.
Aunque en los últimos días se llegó aun acuerdo con los efectivos de San Juan, Catamarca, Chubut y La Rioja, y las conversaciones para llegar a un acuerdo con las fuerzas de Neuquén terminaron bien ayer al mediodía, el conflicto continuaba abierto en Entre Ríos, Santa Fe y Río Negro.
Frente el autoacuartelamiento de las fuerzas de seguridad provinciales, el Gobierno nacional puso al frente de la gestión al secretario de Seguridad, Sergio Berni, y dispuso el envío de gendarmes a distintos puntos de conflicto para evitar que se generen hechos de vandalismo.
En ese marco, gobernadores kirchneristas como Daniel Scioli y Martín Buzzi se apuraron este fin de semana a anunciar aumentos y pago de adicionales adeudados para evitar conflictos. A ellos se sumó ayer el gobierno de Misiones, que dispuso el pago de horas extras adeudadas a los efectivos de la policía. Una situación similar se dio en Chaco, donde el gobernador Juan Carlos Bacileff Ivanoff anunció que a partir de hoy se regularizarán los pagos de servicios adicional y remarcó que se incorporarán 1.200 nuevos agentes a la fuerza de seguridad y al Servicio Penitenciario.
En Entre Ríos, los uniformados le reclamaron al gobernador kirchnerista, Sergio Urribarri que presente una propuesta de aumento salarial y otras mejoras, y señalaron que de lo contrario volverán a movilizarse. Desde el Gobierno no hubo información sobre la situación, pero fuentes policiales dijeron que se trabajaba en un anuncio de aumento para esta semana.
Sin embargo, el conflicto seguía latente en otras zonas como Rosario, donde familiares de policías y el gremio en formación, Apropol, mantenían sus reclamos con una protesta en la puerta de la jefatura de la Unidad Regional II. Además, en la ciudad de Santa Fe agentes autoconvocados cortaron el sábado el tránsito sobre una calle frente a la sede de la Patrulla de Intervención Urbana, a metros de la autopista que va a Rosario.
Volatilidad
En tanto, el ministro de Seguridad de Mendoza, Carlos Aranda, se reunirá hoy con el titular de la Asociación Mutual del Personal Policial (Amuppol), Omar Alcalde, para acercar posiciones respecto de una mejora salarial y disuadir así una eventual protesta.
En Neuquén, los efectivos evaluaban ayer al mediodía la nueva oferta salarial de $ 10.000 para el sueldo básico acercada por el Gobierno, que comenzó a descomprimir el conflicto y terminó con un acuerdo firmado (Ver “Sapag logró...”).
En Río Negro, las autoridades y los uniformados buscaban anoche destrabar el conflicto, según informó el gobierno provincial.
Mientras tanto, agentes de Gendarmería nacional comenzaron a patrullar las calles de la ciudad rionegrina de San Carlos de Bariloche, donde los policías provinciales realizaban protestas. (DyN)
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