22 Diciembre 2013
Báez evadió o lavó dinero para los Kirchner, afirma un diputado
El legislador nacional sostiene que el empresario santacruceño no era millonario y que en pocos años se enriqueció Sánchez, de UNEN, dice que no posee otra explicación el hecho de alquilar propiedades por millones de dólares y no darles ningún uso
BUENOS AIRES.- El diputado nacional Fernando Sánchez estimó que el contrato que el empresario Lázaro Báez mantenía con uno de los hoteles pertenecientes a la familia de la presidenta Cristina Fernández sería parte de maniobras de evasión impositiva o maniobras de lavado de dinero o ambas cosas. Sánchez, de la agrupación opositora UNEN, calificó como obvios los allanamientos realizados ayer por la Justicia en las oficinas porteñas de Austral Construcciones, pertenecientes a Báez, y recordó que en 2008 se hicieron denuncias por otro tipo de delitos que incluía a estas mismas personas y que incluían a las mismas empresas. “Austral Construcciones es la empresa central del grupo Lázaro Báez, un grupo que se ha formado y que ha incrementado sus negocios y su patrimonio solamente al calor de los negocios con el Estado nacional y, en una segunda fase, a partir de los contratos privados que tiene con el ex presidente Néstor Kirchner y ahora con la presidenta de la Nación”, aseveró el legislador.
Sánchez apuntó: “para que una empresa le alquile a la presidenta de la Nación inmuebles tan caros como hoteles en el sur de la Argentina sin que nadie los va a usar, digo o son maniobras de evasión impositiva o maniobras de lavado de dinero o ambas cosas”.
Asimismo señaló que en 2003, cuando Néstor Kirchner asumió la presidencia de la Nación, Lázaro Báez no era una persona rica ni poderosa en el sentido empresarial, sino que era un empleado bancario. (DyN)
Sánchez apuntó: “para que una empresa le alquile a la presidenta de la Nación inmuebles tan caros como hoteles en el sur de la Argentina sin que nadie los va a usar, digo o son maniobras de evasión impositiva o maniobras de lavado de dinero o ambas cosas”.
Asimismo señaló que en 2003, cuando Néstor Kirchner asumió la presidencia de la Nación, Lázaro Báez no era una persona rica ni poderosa en el sentido empresarial, sino que era un empleado bancario. (DyN)
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