24 Febrero 2014
SONRISAS FORZADAS. Cristina Fernández y Scioli, en un acto político. dyn (archivo)
BUENOS AIRES.- A pesar de que en los últimos 20 días se sucedieron importantes voces de políticos kirchneristas, que perciben al gobernador Daniel Scioli como un buen sucesor de la presidenta, Cristina Fernández, son muchos también los que no saben, a ciencia cierta, cuáles son los motivos por los cuales la Presidenta aún no está convencida de que sea la mejor elección.
El debate es simple: por más que el mandatario se muestre públicamente cerca del kirchnerismo y que incluso defienda con vigor sus políticas, no lo quieren como heredero del trono. Están convencidos de que Scioli no continuará los ejes sobre los cuales se desarrolla el “modelo”, publicó “perfil.com”.
El problema para el kirchnerismo es que Scioli encabeza las encuestas junto a Sergio Massa.
“Scioli no nos representa”, se queja un funcionario que ya trabaja en un armado en su provincia y confía en que el kirchnerismo pueda construir un candidato con peso propio para las internas de 2015. “Es muy difícil que sea nuestro candidato”, sentenció uno de los ministros del Gobierno. No es sólo su opinión, asegura reproducir lo que ha escuchado de la propia boca presidencial.
Lo que siente la primera mandataria por el gobernador no es precisamente afinidad. Todo lo contrario. “Ella no quiere que Scioli sea su candidato y está dispuesta a sacrificar muchas cosas para evitarlo”, analiza un secretario de Estado. “Ayudaría a Mauricio Macri o a UNEN para que Scioli no llegue a la segunda vuelta”, confiesa.
Por eso, en los pasillos de los despachos más importantes del oficialismo ya hacen circular que el kirchnerismo va a construir un candidato “puro” para que compita en las internas.
Hay varios precandidatos que ya anunciaron que quieren subirse a la calesita de las primarias y competir por las presidenciales: Sergio “el Pato” Urribarri, gobernador de Entre Ríos; Julián Domínguez, presidente de la Cámara de Diputados; y hasta el senador Aníbal Fernández. Ninguno suma hoy un caudal de votos que pueda preocupar a Scioli. Florencio Randazzo, ministro del Interior y Transporte, es otro de los que empezó a tejer sus planes para jugar en 2015. Tiene las mismas aspiraciones que el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich. Se suma un nombre que muchos comienzan a repetir como un candidato: Axel Kicillof. (perfil.com)
El debate es simple: por más que el mandatario se muestre públicamente cerca del kirchnerismo y que incluso defienda con vigor sus políticas, no lo quieren como heredero del trono. Están convencidos de que Scioli no continuará los ejes sobre los cuales se desarrolla el “modelo”, publicó “perfil.com”.
El problema para el kirchnerismo es que Scioli encabeza las encuestas junto a Sergio Massa.
“Scioli no nos representa”, se queja un funcionario que ya trabaja en un armado en su provincia y confía en que el kirchnerismo pueda construir un candidato con peso propio para las internas de 2015. “Es muy difícil que sea nuestro candidato”, sentenció uno de los ministros del Gobierno. No es sólo su opinión, asegura reproducir lo que ha escuchado de la propia boca presidencial.
Lo que siente la primera mandataria por el gobernador no es precisamente afinidad. Todo lo contrario. “Ella no quiere que Scioli sea su candidato y está dispuesta a sacrificar muchas cosas para evitarlo”, analiza un secretario de Estado. “Ayudaría a Mauricio Macri o a UNEN para que Scioli no llegue a la segunda vuelta”, confiesa.
Por eso, en los pasillos de los despachos más importantes del oficialismo ya hacen circular que el kirchnerismo va a construir un candidato “puro” para que compita en las internas.
Hay varios precandidatos que ya anunciaron que quieren subirse a la calesita de las primarias y competir por las presidenciales: Sergio “el Pato” Urribarri, gobernador de Entre Ríos; Julián Domínguez, presidente de la Cámara de Diputados; y hasta el senador Aníbal Fernández. Ninguno suma hoy un caudal de votos que pueda preocupar a Scioli. Florencio Randazzo, ministro del Interior y Transporte, es otro de los que empezó a tejer sus planes para jugar en 2015. Tiene las mismas aspiraciones que el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich. Se suma un nombre que muchos comienzan a repetir como un candidato: Axel Kicillof. (perfil.com)
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