El carnaval en Villa Carmela se tiñó de sangre

Un joven de 19 años fue asesinado, en la madrugada de ayer, en medio de una batahola que se originó mientras se desarrollaban los corsos en Villa Carmela.

“Alrededor de la 1, Darío Ramón Brandán recibió un puntazo en el pecho que lo dejó mal herido”, comentaron fuentes policiales a LA GACETA.

Los festejos de carnaval se desarrollaban en calle Jorge Luis Borges, frente a la plaza de Villa Carmela. “En un momento, tres jóvenes habrían intentado robar un redoblante de una de las comparsas. Allí comenzó una gresca descomunal que involucró a 40 personas”, narraron las fuentes.

Según los relatos de los testigos, Brandán observó la pelea y decidió intervenir “porque estaban agrediendo a un amigo de nombre Matías”, agregó. Los testigos señalaron a la Policía que en un momento dado la pelea se detuvo, todos se abrieron y observaron a la víctima yacer en el suelo, ensangrentado.

El lugar era un caos. “Un grupo de jóvenes trasladó a Brandán hacia el CAPS, que estaba a dos cuadras”, agregaron las fuentes. Desde allí fue derivado al Centro de Salud, donde murió pasadas las 2.

“Había unas 300 personas participando de la fiesta callejera. Tenemos algunas pistas de quien podría haber sido el homicida pero estamos recabando datos”, agregaron fuentes de la investigación.

Asimismo, los uniformados aguardaban ayer que les entregaran la lista con los integrantes de la comparsa a la que le habrían intentado robar el redoblante.

Destrozos en un club

En otro hecho vandálico ocurrido el domingo, un grupo de 30 personas provocó destrozos y desvalijó la casa del casero del club Belgrano, en Uttinger al 1.300 de Tafi Viejo.

“A las 23.30 unas 500 personas que participaban de los carnavales, se molestaron porque aún no subían a cantar el Negro Videla y Diego Olmos”, contó el presidente del club, José Alsogaray.

“Los corsos empiezan a las 18 y a las 0 terminan en forma indefectible”, agregó. Alsogaray aclaró que el club fue alquilado para este tipo de eventos a Rubén Campero y el “Tano” Bustos. “La gente empezó a insultar y estaba molesta. Esta situación fue aprovechada por un grupo de personas que robó cajones de cerveza de la cantina”, detalló. “Luego subieron al primer piso y en la casa de Jesús Corbalán, el casero, se llevaron de todo”, dijo a este diario.

Según consta en la denuncia policial realizada en la comisaría de Tafí Viejo Centro, los ladrones sustrajeron una cocina, un televisor, ropa, dinero y elementos de albañilería.

“Además destrozaron un juego de comedor y un centro musical”, agregó Alsogaray. Otro hecho llamativo fue que no había policías custodiando, sólo seguridad privada contratada por Campero.

“Antes de las 18 llegaron 20 policías para realizar un servicio adicional, pero los organizadores querían sólo 10. Esta situación habría ofuscado a los efectivos y se retiraron todos”, añadió el presidente del Club.