03 Julio 2014
RECIBIENDO EL PREMIO. Marcela, su marido y tres de sus hijas (falta Dana). la gaceta / foto de héctor peralta
“¡Mamá, mamá, vení! ¡Hemos ganado, hemos ganado!”. Con ese grito -recuerda feliz Marcela Carrizo, de Villa Mariano Moreno- su hija mayor, Johana (18 años), le cambió el día. “Mentira..., le contesté. ¡Mentira!” -cuenta por teléfono Marcela entre risas-. ¡Yo no le creía! Estaba segura de que me estaba haciendo una broma”.
Pero no. Según narra la afortunada lectora, normalmente controlar la grilla es tarea de Walter, su marido. Pero ese día Johana tomó la iniciativa y descubrió que su madre era la dueña del cartón premiado: Marcela había ganado una orden de compra por $ 2.500 para canjear en el Sportsman con los Números de la Suerte de LA GACETA.
“Fuimos todos con mi tarjeta al diario y después a la zapatería. Usé mi premio para comprar zapatillas para las cuatro chicas (Malena tiene 13 años; Dana, 11, y Valentina, 2) y unas botas para mí”, describe.
“Fue un premio totalmente femenino, pero mi marido estaba feliz por nosotras”, aclara.
Pero no. Según narra la afortunada lectora, normalmente controlar la grilla es tarea de Walter, su marido. Pero ese día Johana tomó la iniciativa y descubrió que su madre era la dueña del cartón premiado: Marcela había ganado una orden de compra por $ 2.500 para canjear en el Sportsman con los Números de la Suerte de LA GACETA.
“Fuimos todos con mi tarjeta al diario y después a la zapatería. Usé mi premio para comprar zapatillas para las cuatro chicas (Malena tiene 13 años; Dana, 11, y Valentina, 2) y unas botas para mí”, describe.
“Fue un premio totalmente femenino, pero mi marido estaba feliz por nosotras”, aclara.
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