26 Julio 2014
PARANÁ.- Mirta Cháves, la única condenada por la desaparición de Fernanda Aguirre en 2004, quedó en libertad condicional beneficiada por una ley que prevé la reducción de la pena para quien curse estudios mientras está detenido.
La decisión fue adoptada por la jueza de Ejecución de Penas, Cecilia Bértora, quien confirmó que Cháves está en libertad condicional desde el miércoles, al beneficiarse con una reducción de 20 meses en la pena de 17 años, a la que fue condenada por su participación en el secuestro de la adolescente de 13 años, del que ayer se cumplió una década.
Fernanda Aguirre fue secuestrada el 25 de julio de 2004, alrededor de las 16, cuando caminaba hacia su casa desde el puesto de venta de flores que la familia tiene frente al cementerio de San Benito. El principal sospechoso del hecho, Miguel Ángel Lencina, gozaba en ese momento de una salida laboral de la cárcel de Concepción del Uruguay, donde purgaba una pena por el asesinato de una mujer.
El 6 de agosto de ese año, pocos días después de ser detenido, Lencina apareció ahorcado en la celda de la comisaría 5a. de Paraná, donde estaba alojado. Su viuda, Mirta Cháves, fue condenada en 2007 a 17 años de cárcel, acusada de haber sido quien se comunicó telefónicamente con la familia Aguirre para pedir el rescate de $ 2.000 pesos que exigieron los captores. Durante el juicio, la mujer aseguró desconocer el destino que su marido le dio a la adolescente tras secuestrarla, algo que la investigación policial y el juicio tampoco pudieron determinar. (Télam)
La decisión fue adoptada por la jueza de Ejecución de Penas, Cecilia Bértora, quien confirmó que Cháves está en libertad condicional desde el miércoles, al beneficiarse con una reducción de 20 meses en la pena de 17 años, a la que fue condenada por su participación en el secuestro de la adolescente de 13 años, del que ayer se cumplió una década.
Fernanda Aguirre fue secuestrada el 25 de julio de 2004, alrededor de las 16, cuando caminaba hacia su casa desde el puesto de venta de flores que la familia tiene frente al cementerio de San Benito. El principal sospechoso del hecho, Miguel Ángel Lencina, gozaba en ese momento de una salida laboral de la cárcel de Concepción del Uruguay, donde purgaba una pena por el asesinato de una mujer.
El 6 de agosto de ese año, pocos días después de ser detenido, Lencina apareció ahorcado en la celda de la comisaría 5a. de Paraná, donde estaba alojado. Su viuda, Mirta Cháves, fue condenada en 2007 a 17 años de cárcel, acusada de haber sido quien se comunicó telefónicamente con la familia Aguirre para pedir el rescate de $ 2.000 pesos que exigieron los captores. Durante el juicio, la mujer aseguró desconocer el destino que su marido le dio a la adolescente tras secuestrarla, algo que la investigación policial y el juicio tampoco pudieron determinar. (Télam)