Por Carlos Werner
14 Diciembre 2014
CALENTANDO. El equipo de Mohamed lustra el Gol, minutos antes de la salida. LA GACETA / CARLOS WERNER
Al final de la jornada del viernes, LG Deportiva planteaba que en el automovillismo una pequeña falla mecánica, eléctrica o humana puede hacer que un piloto pase a ser protagonista o se vaya al fondo de una clasificación. Le pasó ayer a Lucas Mohamed, con su VW Gol. De un panorama medianamente favorable, pasó a uno bastante complicado en su afán de ganar el campeonato de la Clase 2 del Turismo Nacional.
En una mala serie (que largó 2°), finalizó 8° y no sumó puntos; por el contrario, el líder Hanna Abdallah (Renault Clio) fue 4° y agregó tres unidades a su cosecha. Resultado: el puntano sacó nueve puntos al yerbabuenense, con 30 en juego, largando diez puestos adelante: 12° a 22°. Es decir, necesita sacarle diez puntos de ventaja en la final, si quiere mantener vivo su sueño. Con tal horizonte, apenas cabe darle crédito a que esto se trata de deportes mecánicos, en los que cualquier cosa puede pasar de un momento a otro.
¿Qué pasó con Lucas? La segunda clasificación fue su talón de Aquiles: terminó último. Esto porque Matías Vidal frenó antes en una curva con su Chevrolet Corsa, y él para no chocarlo con su coche debió irse al pasto y a la tierra. En ese viaje frenético, rompió el caño de escape y dañó la puesta a punto que había conseguido. En poco más de una hora, el equipo debió recuperar lo perdido. Sin embargo, al no haberse bajado demasiado los tiempos logrados el viernes, Mohamed conservó el 4° lugar en la sumatoria de tiempos de clasificación. Por ello partió 2° en la serie 1. Y allí comenzó la segunda parte de su calvario. Largó mal, su coche patinó y perdió puestos. Y entre la primera y segunda vuelta siguió perdiéndolos. En la mitad se estabilizó, pero ya era tarde para buscar recuperar terreno.
Y así como en la segunda serie el tercer candidato al título, el bonaerense Adrián Percaz (Peugeot 206) se autoexcluyó de esa chance por falsa largada, en la tercera Abdallah hizo un trabajo lógico, sin meterse en problemas. Eso sí, casi los tuvo porque a dos giros del final, Diego Pérez (Corsa) erró un cambio, el Renault Clio del puntano lo impactó desde atrás y por poco no termina de complicársele el panorama. Salió adelante, terminó 5°, y luego del trabajo de los comisarios técnicos ascendió al 4° lugar, al haber sido excluido Nicolás Maranzana (Ford) por maniobra peligrosa. En suma, más oro para la corona de Hanna.
En una mala serie (que largó 2°), finalizó 8° y no sumó puntos; por el contrario, el líder Hanna Abdallah (Renault Clio) fue 4° y agregó tres unidades a su cosecha. Resultado: el puntano sacó nueve puntos al yerbabuenense, con 30 en juego, largando diez puestos adelante: 12° a 22°. Es decir, necesita sacarle diez puntos de ventaja en la final, si quiere mantener vivo su sueño. Con tal horizonte, apenas cabe darle crédito a que esto se trata de deportes mecánicos, en los que cualquier cosa puede pasar de un momento a otro.
¿Qué pasó con Lucas? La segunda clasificación fue su talón de Aquiles: terminó último. Esto porque Matías Vidal frenó antes en una curva con su Chevrolet Corsa, y él para no chocarlo con su coche debió irse al pasto y a la tierra. En ese viaje frenético, rompió el caño de escape y dañó la puesta a punto que había conseguido. En poco más de una hora, el equipo debió recuperar lo perdido. Sin embargo, al no haberse bajado demasiado los tiempos logrados el viernes, Mohamed conservó el 4° lugar en la sumatoria de tiempos de clasificación. Por ello partió 2° en la serie 1. Y allí comenzó la segunda parte de su calvario. Largó mal, su coche patinó y perdió puestos. Y entre la primera y segunda vuelta siguió perdiéndolos. En la mitad se estabilizó, pero ya era tarde para buscar recuperar terreno.
Y así como en la segunda serie el tercer candidato al título, el bonaerense Adrián Percaz (Peugeot 206) se autoexcluyó de esa chance por falsa largada, en la tercera Abdallah hizo un trabajo lógico, sin meterse en problemas. Eso sí, casi los tuvo porque a dos giros del final, Diego Pérez (Corsa) erró un cambio, el Renault Clio del puntano lo impactó desde atrás y por poco no termina de complicársele el panorama. Salió adelante, terminó 5°, y luego del trabajo de los comisarios técnicos ascendió al 4° lugar, al haber sido excluido Nicolás Maranzana (Ford) por maniobra peligrosa. En suma, más oro para la corona de Hanna.
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