16 Diciembre 2014
BUENOS AIRES.- El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, descalificó ayer el crítico panorama para la economía argentina que proyectó, para 2015, el periódico británico “The Economist”. La publicación auguró, en un informe de previsiones, que la Argentina enfrentará riesgos de una “inflación desenfrenada”, y de conflictos sociales. El funcionario, calificó al periódico como “una usina conservadora pagada por el sistema financiero”. “Siempre pretenden denostar a la Argentina, pero el país tuvo una estrategia firme de desendeudamiento equivalente a casi U$S 44.000 millones, a partir del superávit de la balanza comercial”, respondió, ante la prensa en la Casa Rosada.
En su reporte “The World in 2015”, que reúne previsiones políticas y económicas, “The Economist” afirmó que la Argentina se expone al peligro de revueltas populares y a una crisis de pagos, en relación a la deuda en default que mantiene con los holdouts. Capitanich refutó los pronósticos al afirmar que la economía nacional tendrá, en 2015, una proyección de deuda decreciente. Además, dijo que la Argentina cuenta con solidez macroeconómica”. “En el presupuesto del año que viene, la inflación prevista es del 15,6%. Se prevé un crecimiento del PBI del 2,8%”, contestó. (DyN)
En su reporte “The World in 2015”, que reúne previsiones políticas y económicas, “The Economist” afirmó que la Argentina se expone al peligro de revueltas populares y a una crisis de pagos, en relación a la deuda en default que mantiene con los holdouts. Capitanich refutó los pronósticos al afirmar que la economía nacional tendrá, en 2015, una proyección de deuda decreciente. Además, dijo que la Argentina cuenta con solidez macroeconómica”. “En el presupuesto del año que viene, la inflación prevista es del 15,6%. Se prevé un crecimiento del PBI del 2,8%”, contestó. (DyN)