22 Diciembre 2014
Lado "B": Relatos de futbolistas, en primera persona
Cuando los futbolistas dan vuelta el casete surgen las mejores anécdotas y hechos curiosos vividos dentro y fuera del campo. Cuentan aquellos sucesos que se escondieron bajo la alfombra durante años pero un día sacaron a la luz y se convirtieron en momentos históricos por su tono gracioso, pícaro y hasta infame. Maradona, Bielsa, Basile, Palermo y “El Pibe” Valderrama son algunos de los personajes principales en esta recopilación de recuerdos imborrables.
El efecto goleador del alcohol
René Houseman, ídolo de Huracán
El santiagueño tiene en su historial el festejo de gol más gracioso: “una tarde me presenté para jugar directo desde un cumpleaños de la noche anterior. Me contaron que me hicieron duchar como una decena de veces y tomar litros de café. Jugábamos de local contra River. Íbamos 0 a 0 pasados los 80’ y parece que fui a buscar un pase de ‘Fatiga’ Russo. La tiré larga entre los centrales y cuando me salió el ‘Pato’ Fillol, amagué, lo eludí y la crucé de derecha. Luego dicen que quedé tirado en el piso riéndome y tras de eso me hice el lesionado, pedí el cambio y me fui directo a dormir a mi casa. La gente me despidió con su tradicional: ‘y chupe, chupe, no deje de chupar. El Loco es lo más grande del fútbol nacional’. ¡Hice un gol borracho!”, se sinceró René.
El "pibe 10", ultra respetuoso
Diego Maradona, máxicmo ídolo argentino
Diego se refirió en una oportunidad a sus principios en Argentinos, cuando comenzaba a desplegar su magia. “Una vez jugábamos ante River, que tenía un equipazo. Ellos apostaban siempre al off side y en una de las jugadas donde yo me “avivo” lo veo a Roberto Perfumo de frente. Uf... Me tiró una patada directa al pecho. Me caí como “50 metros” y cuando se me acercó me levantó de la camiseta y me dijo: ‘¿cierto que no tenés nada nene?’ Yo le dije ‘no Roberto: ¿estás bien del pie, te hice algo?’”. Para el 10 era habitual ese respeto extremo con los viejos. Dardo Urchevich fue otro histórico a los que recordó: “el tucumano era un tipo bárbaro, pero un día me pegó una patada en el entrenamiento y me levantó y me dijo ‘vamos, vamos que acá los chicos no lloran’ y yo le dije que no estaba llorando. Pero... Tenía unas ganas... Es que vos a los profesionales no les podías tirar un caño”, contó Maradona.
El motivo y su costumbre
Carlos "El Pibe" Valderrama, futbolista colombiano, símbolo de América
La figura de “El Pibe” comenzaba a pegar cada vez con más fuerza en Colombia y el resto de América gracias a sus habilidades. En ese entonces, Valderrama jugaba con las medias abajo, entre otras cosas porque todavía la FIFA, en su reglamento, no hacía mención alguna al uso obligado de tobilleras que recubrieran parte de las piernas. Entonces el colombiano comenzó a imponer una moda. Esa imagen era uno de sus distintivos y recién en una entrevista que concedió años después para la TV de su país dio a conocer el simple pero quizás profundo motivo de por qué llevó siempre las medias bajas. Ágil como siempre para salir airoso y simpático en cada pregunta contestó sin incomodarse: “las uso así porque soy un jugador de clase media baja”.
Los enemigos "compinches"
Martín Palermo y Guillermo Barros Schelotto, ídolos de Boca y actuales DT
Hasta que Martín y “Guille” lograron formar una dupla letal e inolvidable de amigos en Boca pasaron historias de sobra. Sus inicios en los clubes enemigos de La Plata (“Titán” en Estudiantes y “El Melli” en Gimnasia) tuvieron mucho que ver en la bronca que se tenían de chicos, y hasta cuando compartieron la primaria. “Nos peleábamos desde segundo o tercer grado hasta las inferiores. Una vez, en el clásico platense fuimos capitanes. Nos saludamos, pero no nos miramos a la cara. Nunca nos llegamos a pegar, aunque siempre estábamos involucrados en los tumultos. Por eso los primeros días de convivencia en Boca fueron medio difíciles. Nos habían puesto en la misma habitación para concentrar y ni nos hablábamos. Ninguno sabía qué decirle al otro. En realidad fue muy gracioso”, reconoció Palermo sobre esa amistad que fue creciendo con el entendimiento que lograron en la delantera de Boca.
"El Bambino" despertador
Héctor Veira, ex fubolista y DT argentino
El hombre de las mil y una anécdotas recordó una vez que durante 1990, mientras entrenaba al equipo español de Cádiz, tenía trabajo extra en las concentraciones: lidiar con Jorge “El Mágico” González. Al parecer, al mejor futbolista salvadoreño de la historia le costaba despegar la cara de la almohada y cumplir con los entrenamientos matutinos del equipo del “Bambi”. “No había forma de despertarlo. Una vez le llevé a la habitación un grupo de flamenco para ver si se levantaba y cuando a duras penas logró ponerse en pie me dijo: ‘sólo me levanto porque me gusta la música’”, contó Veira entre risas. La fama del “Mágico”, algo desordenado y “vagabundo” y su indisciplina (que incluso le impidió triunfar en un equipo grande) confirman los relatos del “Bambino”.
Un apodo bien ganado
Marcelo "El Loco" Bielsa, actual DT del Olympique de Marsella
Detrás de la seriedad con la que parece encarar cada proyecto, salió a la luz el origen del apodo por el cual hasta hoy es reconocido Bielsa. Su Newell’s jugaba la tercera Libertadores pero empezó con el pie izquierdo perdiendo 6 a 0 con San Lorenzo. Los que conocen la historia contaron que los barras responsabilizaron al DT de la goleada y, enfurecidos, decidieron pedirle explicaciones personalmente. Buscaron al DT en su propia casa y luego de no contestar por un rato Bielsa les abrió la puerta como si nada: “si no se van ahora mismo, saco la espoleta y se las tiro”, les dijo con una granada en la mano. Los barras, atónitos, comenzaron a retroceder y “El Loco”, fue por más. Terminó corriéndolos un par de cuadras con la granada en su mano y así ganó “la batalla”.
Nunca se imaginó a quién "tachó"
Alfio "Coco" Basile, ex futbolista y DT argentino
El “Coco” es fija en recopilaciones de hechos memorables. Uno de los suyos se remonta a 1998 cuando dirigía un San Lorenzo golpeado. “Néstor Gorosito era el capitán del equipo y en una previa estaba arengando a los jugadores. En ese momento entró al vestuario el presidente Fernando Miele para decirme que había alguien afuera que quería saludar a los jugadores: ‘es un cura que viene siempre antes del partido’, me dice. Pero yo no quería a nadie que me los desconcentrara, entonces le dije que lo echara. ¿Si no le ganaban a nadie, para qué iba a entrar el cura? Miele se lo dice y el tipo se va”, relató Basile en una entrevista realizada recientemente. “En abril de 2013 me encuentro con Miele en un restaurante y me dice ‘¿viste quién es el Papa Francisco? Bergoglio, el que vos echaste del vestuario de San Lorenzo. Voy a ir a visitarlo a Roma, así se lo cuento, ja”, recordó el DT sobre ese momento con el ahora hincha del “ciclón” más famoso.
Mejor ni intentar marcarlo
Jhon Viáfara, jugador del Deportivo Cali
El más grato recuerdo de Once Caldas, equipo de la Primera de Colombia, fue aquella final de Copa Libertadores en donde venció al temible Boca de Carlos Bianchi por penales. Sin embargo, para Viáfara, al menos el partido de ida jugado el 23 de junio de 2004 en La Bombonera, fue el suceso más incómodo y mal oliente de su carrera. El volante, quizás nervioso ante tremendo marco, no pudo aguantarse las ganas evacuar y a los cinco minutos de juego pidió el cambio. El DT Luis Fernando Montoya, hizo oídos sordos a su pedido y no atendió lo que minutos después le ocurrió a Jhon. No por nada Rolando Schiavi una vez contó que les gritaba a sus compañeros “xeneizes” que no se le acercaran a Viáfara. El colombiano pedía agua a cada rato y se la echaba en la espalda para tratar de combatir el olor. Recién en el entretiempo pudo bañarse y cambiar el uniforme que generalmente era blanco pero que justo ese día fue de otro color.
René Houseman, ídolo de Huracán
El santiagueño tiene en su historial el festejo de gol más gracioso: “una tarde me presenté para jugar directo desde un cumpleaños de la noche anterior. Me contaron que me hicieron duchar como una decena de veces y tomar litros de café. Jugábamos de local contra River. Íbamos 0 a 0 pasados los 80’ y parece que fui a buscar un pase de ‘Fatiga’ Russo. La tiré larga entre los centrales y cuando me salió el ‘Pato’ Fillol, amagué, lo eludí y la crucé de derecha. Luego dicen que quedé tirado en el piso riéndome y tras de eso me hice el lesionado, pedí el cambio y me fui directo a dormir a mi casa. La gente me despidió con su tradicional: ‘y chupe, chupe, no deje de chupar. El Loco es lo más grande del fútbol nacional’. ¡Hice un gol borracho!”, se sinceró René.
El "pibe 10", ultra respetuoso
Diego Maradona, máxicmo ídolo argentino
Diego se refirió en una oportunidad a sus principios en Argentinos, cuando comenzaba a desplegar su magia. “Una vez jugábamos ante River, que tenía un equipazo. Ellos apostaban siempre al off side y en una de las jugadas donde yo me “avivo” lo veo a Roberto Perfumo de frente. Uf... Me tiró una patada directa al pecho. Me caí como “50 metros” y cuando se me acercó me levantó de la camiseta y me dijo: ‘¿cierto que no tenés nada nene?’ Yo le dije ‘no Roberto: ¿estás bien del pie, te hice algo?’”. Para el 10 era habitual ese respeto extremo con los viejos. Dardo Urchevich fue otro histórico a los que recordó: “el tucumano era un tipo bárbaro, pero un día me pegó una patada en el entrenamiento y me levantó y me dijo ‘vamos, vamos que acá los chicos no lloran’ y yo le dije que no estaba llorando. Pero... Tenía unas ganas... Es que vos a los profesionales no les podías tirar un caño”, contó Maradona.
El motivo y su costumbre
Carlos "El Pibe" Valderrama, futbolista colombiano, símbolo de América
La figura de “El Pibe” comenzaba a pegar cada vez con más fuerza en Colombia y el resto de América gracias a sus habilidades. En ese entonces, Valderrama jugaba con las medias abajo, entre otras cosas porque todavía la FIFA, en su reglamento, no hacía mención alguna al uso obligado de tobilleras que recubrieran parte de las piernas. Entonces el colombiano comenzó a imponer una moda. Esa imagen era uno de sus distintivos y recién en una entrevista que concedió años después para la TV de su país dio a conocer el simple pero quizás profundo motivo de por qué llevó siempre las medias bajas. Ágil como siempre para salir airoso y simpático en cada pregunta contestó sin incomodarse: “las uso así porque soy un jugador de clase media baja”.
Los enemigos "compinches"
Martín Palermo y Guillermo Barros Schelotto, ídolos de Boca y actuales DT
Hasta que Martín y “Guille” lograron formar una dupla letal e inolvidable de amigos en Boca pasaron historias de sobra. Sus inicios en los clubes enemigos de La Plata (“Titán” en Estudiantes y “El Melli” en Gimnasia) tuvieron mucho que ver en la bronca que se tenían de chicos, y hasta cuando compartieron la primaria. “Nos peleábamos desde segundo o tercer grado hasta las inferiores. Una vez, en el clásico platense fuimos capitanes. Nos saludamos, pero no nos miramos a la cara. Nunca nos llegamos a pegar, aunque siempre estábamos involucrados en los tumultos. Por eso los primeros días de convivencia en Boca fueron medio difíciles. Nos habían puesto en la misma habitación para concentrar y ni nos hablábamos. Ninguno sabía qué decirle al otro. En realidad fue muy gracioso”, reconoció Palermo sobre esa amistad que fue creciendo con el entendimiento que lograron en la delantera de Boca.
"El Bambino" despertador
Héctor Veira, ex fubolista y DT argentino
El hombre de las mil y una anécdotas recordó una vez que durante 1990, mientras entrenaba al equipo español de Cádiz, tenía trabajo extra en las concentraciones: lidiar con Jorge “El Mágico” González. Al parecer, al mejor futbolista salvadoreño de la historia le costaba despegar la cara de la almohada y cumplir con los entrenamientos matutinos del equipo del “Bambi”. “No había forma de despertarlo. Una vez le llevé a la habitación un grupo de flamenco para ver si se levantaba y cuando a duras penas logró ponerse en pie me dijo: ‘sólo me levanto porque me gusta la música’”, contó Veira entre risas. La fama del “Mágico”, algo desordenado y “vagabundo” y su indisciplina (que incluso le impidió triunfar en un equipo grande) confirman los relatos del “Bambino”.
Un apodo bien ganado
Marcelo "El Loco" Bielsa, actual DT del Olympique de Marsella
Detrás de la seriedad con la que parece encarar cada proyecto, salió a la luz el origen del apodo por el cual hasta hoy es reconocido Bielsa. Su Newell’s jugaba la tercera Libertadores pero empezó con el pie izquierdo perdiendo 6 a 0 con San Lorenzo. Los que conocen la historia contaron que los barras responsabilizaron al DT de la goleada y, enfurecidos, decidieron pedirle explicaciones personalmente. Buscaron al DT en su propia casa y luego de no contestar por un rato Bielsa les abrió la puerta como si nada: “si no se van ahora mismo, saco la espoleta y se las tiro”, les dijo con una granada en la mano. Los barras, atónitos, comenzaron a retroceder y “El Loco”, fue por más. Terminó corriéndolos un par de cuadras con la granada en su mano y así ganó “la batalla”.
Nunca se imaginó a quién "tachó"
Alfio "Coco" Basile, ex futbolista y DT argentino
El “Coco” es fija en recopilaciones de hechos memorables. Uno de los suyos se remonta a 1998 cuando dirigía un San Lorenzo golpeado. “Néstor Gorosito era el capitán del equipo y en una previa estaba arengando a los jugadores. En ese momento entró al vestuario el presidente Fernando Miele para decirme que había alguien afuera que quería saludar a los jugadores: ‘es un cura que viene siempre antes del partido’, me dice. Pero yo no quería a nadie que me los desconcentrara, entonces le dije que lo echara. ¿Si no le ganaban a nadie, para qué iba a entrar el cura? Miele se lo dice y el tipo se va”, relató Basile en una entrevista realizada recientemente. “En abril de 2013 me encuentro con Miele en un restaurante y me dice ‘¿viste quién es el Papa Francisco? Bergoglio, el que vos echaste del vestuario de San Lorenzo. Voy a ir a visitarlo a Roma, así se lo cuento, ja”, recordó el DT sobre ese momento con el ahora hincha del “ciclón” más famoso.
Mejor ni intentar marcarlo
Jhon Viáfara, jugador del Deportivo Cali
El más grato recuerdo de Once Caldas, equipo de la Primera de Colombia, fue aquella final de Copa Libertadores en donde venció al temible Boca de Carlos Bianchi por penales. Sin embargo, para Viáfara, al menos el partido de ida jugado el 23 de junio de 2004 en La Bombonera, fue el suceso más incómodo y mal oliente de su carrera. El volante, quizás nervioso ante tremendo marco, no pudo aguantarse las ganas evacuar y a los cinco minutos de juego pidió el cambio. El DT Luis Fernando Montoya, hizo oídos sordos a su pedido y no atendió lo que minutos después le ocurrió a Jhon. No por nada Rolando Schiavi una vez contó que les gritaba a sus compañeros “xeneizes” que no se le acercaran a Viáfara. El colombiano pedía agua a cada rato y se la echaba en la espalda para tratar de combatir el olor. Recién en el entretiempo pudo bañarse y cambiar el uniforme que generalmente era blanco pero que justo ese día fue de otro color.