02 Enero 2015
TRASLADO. Socorristas trasladan desde un helicóptero el cuerpo de uno de los pasajeros recuperados del mar. Todo Indonesia llora el desastre. reuters
YAKARTA.- El mar embravecido impidió en las últimas horas que buzos inspeccionaran el lugar donde se estrelló el vuelo de AirAsia frente a las costas de Borneo, pero uno de los responsables de la búsqueda dijo que podría pasar una semana antes de lograr recuperar las cajas negras de la aeronave. Hasta ahora se han recuperado nueve cuerpos del Airbus A320-200, que se estrelló el domingo durante un viaje desde Surabaya, en Indonesia, a Singapur, con 162 personas a bordo. Los cuerpos han sido trasladados en ataúdes numerados a Surabaya, donde los familiares de las víctimas esperan por noticias sobre sus seres queridos.
El presidente ejecutivo de AirAsia Indonesia, Sunu Widyatmoko, no pudo contener las lágrimas cuando las autoridades entregaron el cuerpo de la primera víctima, Hayati Luthfiah Hamid, a sus familiares en un hospital de Surabaya.
Hamid, de 49 años, fue enterrada el jueves antes del anochecer en el suburbio de Desa Sawotratap, a pocos kilómetros de la ciudad, durante una ceremonia islámica a la que asistieron familiares y vecinos. Tres miembros de la familia de la mujer también viajaban en el avión.
“Su casa ha estado en pánico desde el domingo”, dijo Umaroyah, un vecino de la familia. “Todos en el barrio conocen a alguien que iba en el avión”.
La búsqueda cubre un área de 13.500 kilómetros cuadrados y participaban 19 barcos, cuatro helicópteros y cinco aviones, informó Fransiskus Bambang Soelistyo, director de la Agencia de Búsqueda y Rescate de Indonesia.
Un piloto de patrullaje divisó una extensa sombra en el mar, que los rescatistas creen podría ser el avión, pero han dejado en claro que no está confirmado.
“Hasta ahora, no hay un hallazgo confirmado ni imágenes de sonar del avión bajo el agua”, dijo Soelistyo. Cuarenta y siete buzos forman los equipos que esperan para llevar a cabo la inspección del lugar.
“Espero que la última información sea correcta y el avión haya sido hallado”, dijo el CEO de la aerolínea, Tony Fernandes, a través de Twitter. “Por favor, todos tengan esperanzas juntos. Esto es tan importante”, agregó.
Toos Sanitiyoso, un investigador de seguridad aérea del Comité Nacional de Seguridad del Transporte, dijo que hallar las cajas negras podría tomar una semana. El director del comité, Tatang Kurniadi, explicó que la búsqueda, una vez que se calmen las aguas en cinco días según está pronosticado, se centraba alrededor de la sombra.
“Estamos rastreando desde donde los restos fueron hallados hasta donde el avión envió su última lectura y ahí se centra la búsqueda”, dijo Kurniadi.
“La profundidad es de unos 50 metros. No se necesita ningún equipo especial. Los buzos pueden llegar”, explicó.
Los investigadores trabajan sobre la teoría de que el avión sufrió una pérdida de sustentación aerodinámica mientras ascendía para evitar una tormenta, unos 40 minutos después de despegar.
El comandante de los submarinistas, Edi Tirkayasa, aseguró que el clima hacía las operaciones mucho más difícil.
“Lo que es más difícil es hallar la ubicación donde cayó el avión, chequear si la aeronave está realmente allí”, sostuvo. “Esto es muy difícil incluso con el equipo más sofisticado. Con el tiempo como está, quién sabe. Todavía somos optimistas de que lo hallarán. Deben hacerlo”, agregó.
Hasta ahora, además de los cuerpos, se recuperaron una maleta, una puerta de emergencia y un chaleco salvavidas de las aguas cercanas a donde se sospecha se estrelló el avión. No se han hallado sobrevivientes. Las autoridades recogieron muestras de ADN para ayudar en la identificación de los cuerpos. La mayoría de las personas a bordo del avión eran de origen indonesio. (Reuters)
El presidente ejecutivo de AirAsia Indonesia, Sunu Widyatmoko, no pudo contener las lágrimas cuando las autoridades entregaron el cuerpo de la primera víctima, Hayati Luthfiah Hamid, a sus familiares en un hospital de Surabaya.
Hamid, de 49 años, fue enterrada el jueves antes del anochecer en el suburbio de Desa Sawotratap, a pocos kilómetros de la ciudad, durante una ceremonia islámica a la que asistieron familiares y vecinos. Tres miembros de la familia de la mujer también viajaban en el avión.
“Su casa ha estado en pánico desde el domingo”, dijo Umaroyah, un vecino de la familia. “Todos en el barrio conocen a alguien que iba en el avión”.
La búsqueda cubre un área de 13.500 kilómetros cuadrados y participaban 19 barcos, cuatro helicópteros y cinco aviones, informó Fransiskus Bambang Soelistyo, director de la Agencia de Búsqueda y Rescate de Indonesia.
Un piloto de patrullaje divisó una extensa sombra en el mar, que los rescatistas creen podría ser el avión, pero han dejado en claro que no está confirmado.
“Hasta ahora, no hay un hallazgo confirmado ni imágenes de sonar del avión bajo el agua”, dijo Soelistyo. Cuarenta y siete buzos forman los equipos que esperan para llevar a cabo la inspección del lugar.
“Espero que la última información sea correcta y el avión haya sido hallado”, dijo el CEO de la aerolínea, Tony Fernandes, a través de Twitter. “Por favor, todos tengan esperanzas juntos. Esto es tan importante”, agregó.
Toos Sanitiyoso, un investigador de seguridad aérea del Comité Nacional de Seguridad del Transporte, dijo que hallar las cajas negras podría tomar una semana. El director del comité, Tatang Kurniadi, explicó que la búsqueda, una vez que se calmen las aguas en cinco días según está pronosticado, se centraba alrededor de la sombra.
“Estamos rastreando desde donde los restos fueron hallados hasta donde el avión envió su última lectura y ahí se centra la búsqueda”, dijo Kurniadi.
“La profundidad es de unos 50 metros. No se necesita ningún equipo especial. Los buzos pueden llegar”, explicó.
Los investigadores trabajan sobre la teoría de que el avión sufrió una pérdida de sustentación aerodinámica mientras ascendía para evitar una tormenta, unos 40 minutos después de despegar.
El comandante de los submarinistas, Edi Tirkayasa, aseguró que el clima hacía las operaciones mucho más difícil.
“Lo que es más difícil es hallar la ubicación donde cayó el avión, chequear si la aeronave está realmente allí”, sostuvo. “Esto es muy difícil incluso con el equipo más sofisticado. Con el tiempo como está, quién sabe. Todavía somos optimistas de que lo hallarán. Deben hacerlo”, agregó.
Hasta ahora, además de los cuerpos, se recuperaron una maleta, una puerta de emergencia y un chaleco salvavidas de las aguas cercanas a donde se sospecha se estrelló el avión. No se han hallado sobrevivientes. Las autoridades recogieron muestras de ADN para ayudar en la identificación de los cuerpos. La mayoría de las personas a bordo del avión eran de origen indonesio. (Reuters)