06 Enero 2015
CARACAS. Un cartel con la figura de Leopoldo López aparece en una calle. reuters
CARACAS.- El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, dijo que accedería a ofrecer un indulto al líder opositor Leopoldo López, preso desde hace casi un año, sólo si Estados Unidos accediera a liberar al puertorriqueño Óscar López Rivera, condenado por conspiración sediciosa. López, un carismático líder del ala más dura de la oposición, se entregó a la Justicia en febrero de 2014 durante las protestas antigubernamentales que azotaron al país, acusado de aupar la violencia callejera. “La única forma que yo usaría las facultades especiales que tengo es para montarlo en un avión (a López), que vaya a los Estados Unidos, lo deje allá y me entreguen a Óscar López Rivera”, planteó el mandatario antes de iniciar un viaje a China. López Rivera es un militante independentista de Puerto Rico, isla que mantiene estatus de Estado Libre Asociado con Estados Unidos. Fue condenado a 70 años en prisión, de los que ha cumplido 33, acusado de colocar varias bombas en Estados Unidos. En 1999 rechazó un indulto presidencial ofrecido por Bill Clinton. Sus simpatizantes lo consideran un preso político.
En un reciente encuentro entre Maduro y el vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden, este había urgido al mandatario a liberar a los “presos políticos”. El mandatario negó estas versiones. Maduro agregó que “soltar al monstruo de Ramo Verde”, como se refiere a López, haciendo alusión al nombre de la prisión militar donde espera condena, era un “asunto nacional”.
El Gobierno, cómo lo hizo el fallecido líder Hugo Chávez, niega mantener presos de conciencia y alude que una decena de políticos encarcelados están tras las rejas no por sus preferencias políticas, sino por violar la ley.
Pero, la esposa de López, Lilian Tintori, rechazó la propuesta que hizo Maduro de liberarlo a cambio del líder independentista puertorriqueño preso en Estados Unidos. “Con sus declaraciones, Maduro admite que Leopoldo López es un preso político de su régimen y que no hay independencia de poderes. Maduro: Este no es un tema de canjes, es un tema de justicia. Deja el miedo, liberen a Leopoldo”, escribió Tintori en su cuenta de Twitter. “Ningún preso político está sujeto a chantaje para su liberación”, añadió. Tintori recordó que el juicio contra su esposo se reanuda después de una serie de audiencias fallidas, ante la exigencia de López de que el tribunal lo libere por la sugerencia del comité de detenciones arbitrarias de la ONU.
López enfrenta varios cargos por supuestamente instigar las protestas contra el gobierno que sacudieron el país entre febrero y mayo de 2014, y dejaron 43 muertos. Los cargos prevén una pena de hasta 10 años de cárcel. (Reuters-DPA)
En un reciente encuentro entre Maduro y el vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden, este había urgido al mandatario a liberar a los “presos políticos”. El mandatario negó estas versiones. Maduro agregó que “soltar al monstruo de Ramo Verde”, como se refiere a López, haciendo alusión al nombre de la prisión militar donde espera condena, era un “asunto nacional”.
El Gobierno, cómo lo hizo el fallecido líder Hugo Chávez, niega mantener presos de conciencia y alude que una decena de políticos encarcelados están tras las rejas no por sus preferencias políticas, sino por violar la ley.
Pero, la esposa de López, Lilian Tintori, rechazó la propuesta que hizo Maduro de liberarlo a cambio del líder independentista puertorriqueño preso en Estados Unidos. “Con sus declaraciones, Maduro admite que Leopoldo López es un preso político de su régimen y que no hay independencia de poderes. Maduro: Este no es un tema de canjes, es un tema de justicia. Deja el miedo, liberen a Leopoldo”, escribió Tintori en su cuenta de Twitter. “Ningún preso político está sujeto a chantaje para su liberación”, añadió. Tintori recordó que el juicio contra su esposo se reanuda después de una serie de audiencias fallidas, ante la exigencia de López de que el tribunal lo libere por la sugerencia del comité de detenciones arbitrarias de la ONU.
López enfrenta varios cargos por supuestamente instigar las protestas contra el gobierno que sacudieron el país entre febrero y mayo de 2014, y dejaron 43 muertos. Los cargos prevén una pena de hasta 10 años de cárcel. (Reuters-DPA)