“Los costos van por el ascensor y los precios por la escalera”

Martínez y Pérez reconocen que el sector sojero atraviesa una etapa de crisis aguda

09 Enero 2015
“La estrategia, hoy, es seguir para mantenernos en carrera, porque no es negocio hacer soja ni maíz ni trigo. Pararse es peor; por eso, nuestra prioridad es trabajar en campos propios y dejar los arriendos”, es la síntesis del diálogo que LA GACETA Rural mantuvo con los productores Osvaldo Martínez (presidente) y Orlando Pérez (consejero), de la Cooperativa Unión y Progreso de La Ramada, departamento Burruyacu, al noreste de Tucumán.

“Hoy, para muchos no es rentable producir, porque nuestro sector está muy complicado en los aspectos financieros. Para 2015, nuestra esperanza está centrada en que, hasta la cosecha, la soja tenga un brinco en su cotización. Previo a eso, esperamos que llueva lo suficiente como para completar la siembra, y también para que muchos productores pueden iniciar la siembra de sus campos que vienen muy atrasados por la falta de agua”, resumió Martínez.

“¿Por qué todo esto? porque el productor está condenado a sembrar porque no tiene otro recursos en el cual apoyarse”, se autopreguntó y respondió Pérez ante nuestro cronista.

“Estamos muy presionados por las desigualdades, porque mientras los precios van por escalera, los costos viajan por ascensor”, definió Martínez. “El precio está pisado por el tipo de cambio”, dijo el presidente cooperativista, para agregar: “los costos crecieron y crecen sin control, pasando por la mano de obra, los insumos y el combustible”.

En este punto, Martínez reconoció que “hay productores que hace cuatro años que no fertilizan porque les faltan recursos financieros, por lo que se les viene abajo la curva de rendimiento”.

Alerta

Los productores reconocieron que el sector atraviesa un fuerte proceso de crisis.

“Estamos en alerta porque los números -la ecuación económica- están muy fieros; hay campos grandes, en zonas marginales, que quedaron libres y sin alternativas productivas para más adelante”, comentó Pérez. A lo que Martínez agregó: “el productor ya no tiene resto financiero, porque el resultado económico 2014 fue casi nulo. Ahora, con la siembra retrasada, los números se volvieron negativos. Incluso, hay campos alquilados donde tampoco dan los números”.

Respecto del atraso de la siembra, ambos productores reconocieron que quedan muchos campos sin sembrar. “No existe perfil de humedad del suelo suficiente; y allí está el retraso”, señalaron.

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