26 Enero 2015
BUENOS AIRES.- El hombre que supo ganar todo con Boca, convertirse en profeta en Villarreal (España) y enamorar a los hinchas de la Selección, le dijo adiós al fútbol. Juan Román Riquelme confirmó que no jugará más pese a haber recibido ofertas de Paraguay y Brasil.
En una extensa entrevista con ESPN, el ahora ex enganche habló de todo, de sus orígenes que nunca cambió en una cancha. “Me salía jugar así como en el barrio, es el juego más lindo que hay, lo elegí de chiquito”, sostuvo Román, que de la semana tiene un día preferido. “El domingo era el más lindo. Salía a la cancha y hacía lo que disfrutaba. Ahora seré hincha y sufriré con Agustín (su hijo). Puede que se nos escape alguna puteada, somos muy ‘bosteros’. Me van a ver seguido en la cancha”, avisó que irá a alentar a La Bombonera.
Sobre su paso por los seleccionados, dijo: “(José) Pekerman me ha enseñado muchísimo, a los 14 años ya me llevó al Juvenil. Hemos ganado mucho. Fui al Mundial de 2006, lo admiro y lo quiero mucho. Jugué con futbolistas increíbles”. Y en cuanto a su arribo a Barcelona y su relación con Louis Van Gaal, DT de aquel entonces, relató: “me dijo que era el mejor del mundo cuando teníamos la pelota y cuando no la teníamos era como jugar con uno menos. Me explicó que él no estaba convencido de traerme, pero yo aprendí muchísimo. Sus entrenamientos, una maravilla”.
El debut en Boca: “Bilardo me salvó la vida. Me preguntó de qué quería jugar y le dije que menos arquero o defensor hacía cualquier cosa. En el debut contra Unión me dijo que mis compañeros me la iban a dar siempre”.
Pese a que la noticia cayó como balde de agua helada en los hinchas de Riquelme, el “10” habló en parte como ex jugador. “Estoy con muchas ganas de disfrutar de ahora en adelante. Aunque sé que ningún trabajo me va a dar las satisfacciones que me daba el fútbol”, subrayó. Admitió que tuvo varias propuestas para seguir, pero juró que en Primera solo puede usar una camiseta: la de Boca.
“Jugué en el equipo más grande de la historia de Boca. 40 partidos sin perder, le ganamos a Real Madrid. Córdoba, Ibarra, Samuel, Delgado, Serna, Palermo, es como el Barcelona de Guardiola”, tiró y eligió un gol en particular. “El de la cancha de River contra Brasil, el día que clasificamos al Mundial 2006. Ese gol fue lindo”. También avanzó en política. “Puede ser que el día de mañana me anime a ser presidente de Boca. No creo que sea técnico, no coincido mucho con los chicos de hoy”, asumió.
Al momento de elegir al mejor, no dudó. “Maradona para mí es único, es el mejor de la historia. Para mi hijo es (Lionel) Messi. Maradona fue un lujo, tuve la suerte de jugar con él, de verlo entrenar. Con verlo hacer la entrada en calor ya te podías ir a tu casa, hacía un show con la pelota, con una botella se ponía a hacer jueguitos. Como jugador fue una cosa increíble. También Messi, que tiene dos cosas que lo van a seguir haciendo el mejor del mundo: le gusta competir, le gusta ser el mejor. Somos argentinos y lo disfrutamos al máximo”.
En una extensa entrevista con ESPN, el ahora ex enganche habló de todo, de sus orígenes que nunca cambió en una cancha. “Me salía jugar así como en el barrio, es el juego más lindo que hay, lo elegí de chiquito”, sostuvo Román, que de la semana tiene un día preferido. “El domingo era el más lindo. Salía a la cancha y hacía lo que disfrutaba. Ahora seré hincha y sufriré con Agustín (su hijo). Puede que se nos escape alguna puteada, somos muy ‘bosteros’. Me van a ver seguido en la cancha”, avisó que irá a alentar a La Bombonera.
Sobre su paso por los seleccionados, dijo: “(José) Pekerman me ha enseñado muchísimo, a los 14 años ya me llevó al Juvenil. Hemos ganado mucho. Fui al Mundial de 2006, lo admiro y lo quiero mucho. Jugué con futbolistas increíbles”. Y en cuanto a su arribo a Barcelona y su relación con Louis Van Gaal, DT de aquel entonces, relató: “me dijo que era el mejor del mundo cuando teníamos la pelota y cuando no la teníamos era como jugar con uno menos. Me explicó que él no estaba convencido de traerme, pero yo aprendí muchísimo. Sus entrenamientos, una maravilla”.
El debut en Boca: “Bilardo me salvó la vida. Me preguntó de qué quería jugar y le dije que menos arquero o defensor hacía cualquier cosa. En el debut contra Unión me dijo que mis compañeros me la iban a dar siempre”.
Pese a que la noticia cayó como balde de agua helada en los hinchas de Riquelme, el “10” habló en parte como ex jugador. “Estoy con muchas ganas de disfrutar de ahora en adelante. Aunque sé que ningún trabajo me va a dar las satisfacciones que me daba el fútbol”, subrayó. Admitió que tuvo varias propuestas para seguir, pero juró que en Primera solo puede usar una camiseta: la de Boca.
“Jugué en el equipo más grande de la historia de Boca. 40 partidos sin perder, le ganamos a Real Madrid. Córdoba, Ibarra, Samuel, Delgado, Serna, Palermo, es como el Barcelona de Guardiola”, tiró y eligió un gol en particular. “El de la cancha de River contra Brasil, el día que clasificamos al Mundial 2006. Ese gol fue lindo”. También avanzó en política. “Puede ser que el día de mañana me anime a ser presidente de Boca. No creo que sea técnico, no coincido mucho con los chicos de hoy”, asumió.
Al momento de elegir al mejor, no dudó. “Maradona para mí es único, es el mejor de la historia. Para mi hijo es (Lionel) Messi. Maradona fue un lujo, tuve la suerte de jugar con él, de verlo entrenar. Con verlo hacer la entrada en calor ya te podías ir a tu casa, hacía un show con la pelota, con una botella se ponía a hacer jueguitos. Como jugador fue una cosa increíble. También Messi, que tiene dos cosas que lo van a seguir haciendo el mejor del mundo: le gusta competir, le gusta ser el mejor. Somos argentinos y lo disfrutamos al máximo”.