La citricultura nacional debe entender que el HLB es un problema para todos

Sánchez Loria (ATC) reflexionó sobre la importancia que tienen los controles permanentes. Sugirió ser más exigentes en cuanto el control global en el país de la enfermedad

EN LAS CEJAS. El cargamento fue detenido en un control realizado entre el Senasa y la Secretaría de Asuntos Agrarios.  EN LAS CEJAS. El cargamento fue detenido en un control realizado entre el Senasa y la Secretaría de Asuntos Agrarios.
13 Marzo 2015
El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) detectó, decomisó y destruyó, la semana pasada, casi 29.000 kilogramos de naranjas que eran transportadas de manera irregular y no contaban con la documentación pertinente. La medida se cumplió durante una inspección de rutina realizada por agentes del Centro Regional NOA Sur del organismo, junto con personal de la Secretaría de Asuntos Agrarios y Alimentos (Saaya) de Tucumán y la Asociación Fitosanitaria del NOA (Afinoa). LA GACETA Rural dialogó con el productor Roberto Sánchez Loria, presidente de la Asociación Tucumana del Citrus (ATC), con quien evaluó la marcha de las medidas preventivas y de control contra el HLB (Huanlongbing de los cítricos o ex Greening).

- Si el cargamento provenía de Mocoretá, Corrientes (a casi 1.200 km de Tucumán), una zona con vector del HLB, ¿por qué recién lo detuvieron en nuestra provincia?

- El cargamento fue detectado por el Senasa. Lo que ocurrió es grave. Sugerimos que el Senasa extreme las medidas de control en los lugares de origen de las mercaderías, poniendo el acento en lo que establece la Resolución 165 del organismo, que como Mocoretá pertenece al Área con Condición Fitosanitaria 2, con presencia de Diaphorina citri y sin presencia de HLB en plantas cítricas y/u hospederos alternativos, no se debía permitir el movimiento de mercaderías sin su certificado y sin la verificación del Senasa, que avala que esa mercadería tiene los tratamientos necesarios para ser transportada. Por eso, el Senasa emite los certificados que permiten que la gente transporte las mercaderías sin problemas.

- Desde la ATC también impulsan otras medidas preventivas.

- Efectivamente. Apuntamos a que todo transporte que traiga mercadería a Tucumán y provenga de zonas de riesgo, aparte de la Certificación del Senasa, el transportista debe pasar por una barrera y hacerla sellar, y que esa Certiticación sea absolutamente válida. Esto es un avance y estamos tratando de instrumentarlo con el Senasa, para desalentar el uso de mercaderías sin los tratamientos fitosanitarios adecuados.

- ¿La falla está en el lugar de origen de la mercadería?

- Tenemos que ser muy cuidadosos, porque puede haber mala fe del que vende y del que compra. Lo que tenemos que tratar es de ser cada vez más exigentes en cuanto al control global del país. Sí debe haber control en origen, pero también debemos ser fuertes en la recepción.

El Senasa tiene que extremar los controles en todo el país. El Senasa también está está tratando de implementar el DTV (Documento de Tránsito Vegetal) electrónico, imprescindible para mover mercadería y sólo puede otorgarlo el Senasa. El DTA (Documento de Tránsito Animal) ayudó a reducir sensiblemente el abigeato. Entonces, el DTV puede ser un documento muy valioso para el control del tránsito de mercaderías.

Estas medidas, bien hechas, son buenas para desalentar los movimientos de mercaderías sospechosos. El DTV empezará por el citrus, y después seguirá con todos los vegetales.

- La ATC no baja los brazos.

- Desde la ATC estamos dispuestos a seguir trabajando con el Senasa en todas y cada una de las medidas. El Programa de Lucha Contra el HLB incluye buenas medidas científicas y de comunicación. Pero falta poner más énfasis sobre el tránsito de mercaderías. Apoyamos el ciento por ciento de las medidas que dispone el Senasa para controlar el movimiento de mercaderías.

- ¿Qué recomendaciones podemos dejar para los citricultores?

- Hacer monitoreos permanentes; recorrer las fincas con mucha frecuencia; y adquirir plantas de viveros reconocidos y habilitados por el Senasa. Para la comunidad citrícola nacional nuestras reflexiones son: entender que tenemos un problema común a la citrícultura; tomar conciencia los productores del NOA y del NEA; no enviar material genético que no cumpla las reglamentaciones; evitar las pérdidas comerciales, ya que camión interceptado significa cargamento decomisado; entender que todos necesitamos del producto ‘citrus’; evitar que ingrese la enfermedad que puede generar graves quebrantos; entender que las medidas no son en contra de la actividad, y sí a favor.

- Tucumán debe cuidar sus ventajas.

- Tenemos importantes ventajas: no existe la enfermedad ni el vector. Aprovechemos y cuidemos estas ventajas, Tenemos fruta limpia, jugo limpio y aceites limpios. También entendemos que las barreras deben ser más eficientes. Los controles deben ser más duros, y menos laxos.

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