Hallaron en la estancia de Báez la bóveda que señaló Fariña

Está ubicada arriba de la cochera y tiene alrededor de 300 metros cuadrados.

Plano de la estancia La Julia que Carlos, el albañil, le mostró a Clarín. FOTO TOMADA DE CLARÍN. Plano de la estancia La Julia que Carlos, el albañil, le mostró a Clarín. FOTO TOMADA DE CLARÍN.
30 Abril 2016
SANTA CRUZ.- Efectivos federales realizaron 40 allanamientos esta semana luego de que Leonardo Fariña presentara una declaración ante el juez Sebastián Casanello, en donde afirmaba que en la estancia La Julia, Lázaro Báez, había construido cocheras, que eran la fachada para esconder el sector de las bóvedas.

Los efectivos ingresaron al campo, donde encontraron un espacio similar a la "bóveda" de la que se habló en la causa: con puerta de chapa color negra, reforzada y ubicada arriba de la cochera, según reprodujo Clarín. Además la Justicia encontró un entrepiso con escombros, donde entran de alto dos cajas apiladas. Todos los hallazgos respaldan los dichos del ex valijero.

Con un portón blanco del lado derecho de la propiedad, según pudo constatar Clarín, se encuentra la cochera para los vehículos, con un radiador para calefaccionar el ambiente. Una escalera en caracol de hierro labrada con forma de flores en sus barandas, lleva a una bodega de vinos, con detalles en las estructuras de madera en semicírculo y con ladrillos a la vista. En ese espacio sobresale una puerta negra de chapa reforzada. Al abrirla, su interior completamente de cemento pero notoriamente desmejorado, ahora alberga solo humedad y mal olor, causados por una pérdida de agua cuya filtración llega hasta allí.

Carlos, el albañil que habló en Calafate con el fotógrafo de Clarín, compartió con él los planos de esa y otras propiedades de Baez, en las que él trabajo. El ex esposo de la modelo Karina Jelinek habló incluso de “dinero que no servía por la humedad”.

Báez pagó U$S 800.000 por esa propiedad y se comunica por un camino interno con la estancia Cruz Aike, donde encontraron un entrepiso que está lleno de escombros y que hacen sospechar a los investigadores que ese espacio era un posible escondite con una determinada finalidad. 

Fariña, en la ampliación de su declaración, contó que el día en que viajó en el avión de Báez fue recibido sólo por su hijo Martín, dado que Lázaro se encontraba en La Julia organizando un movimiento de dinero. Según reconstruyó la Justicia, la última vez que el empresario K pisó ese terreno rodeado de lujos y espacios cargados de sospechas, fue el año pasado.

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