La Unión de Rugby de Tucumán (URT) decidió anoche suspender por 99 años al jugador del club Aguará Guazú, de Aguilares, que le arrancó de un modisco un pedazo del dedo meñique a un rival de Corsarios, de Los Pocitos, durante un partido.
La dura sanción, que fue considerada como ejemplificadora por la mesa directiva, recayó sobre el rugbier Víctor Macías y se publicará en las próximas horas. A horas de conocerse el hecho, que ocurrió el 10 del corriente, la URT había suspendido de manera provisoria al agresor. El nombre de Macías se conoció tras la publicación que la URT realizó en el boletín 25 del 16 de este mes, en el acta 23 del Tribunal de Disciplina.
"Hechos como este no tienen ninguna relación con el espíritu y los valores que pregona nuestro deporte. Por esa razón, afirmamos que no pueden existir y que deben ser erradicados. Vamos a tomar las medidas correspondientes y se actuará según lo establecido por los reglamentos”, había señalado en un comunicado la URT.
Daniel “Chanchín” Contreras fue la víctima del increíble episodio y en diálogo con LA GACETA había sostenido: "en los 29 años que llevo jugando al rugby nunca vi algo igual. Yo no soy ninguna 'Carmelita Descalza', pero nunca se me ocurriría hacer algo así”.
La acción se produjo luego de un “ruck”. Ambos cayeron y al intentar levantarse Contreras advirtió que le faltaba un pedazo de dedo. “No lo podía creer. El árbitro me pidió que salga para que me atendiera el médico. No reaccioné porque mi esposa y mis hijas estaban en la cancha”, explicó.