04 Agosto 2016
BRASILIA.- Un informe del Senado sostiene que la suspendida presidenta, Dilma Rousseff, violó la Constitución al manipular las cuentas públicas, un paso que pone cada vez más cerca la decisión final de su juicio político. El reporte está previsto que sea aprobado mañana por la Comisión del Juicio Político y el próximo martes por el pleno del Senado, para llegar así a la fase final de la impugnación, en la que los 81 senadores deben alcanzar un veredicto para finales de agosto o los primeros días de septiembre.
El impeachment ha paralizado la política brasileña por siete meses y mantiene al presidente interino, Michel Temer, en un limbo legal que ha obstaculizado sus esfuerzos por sacar a Brasil de la crisis fiscal y de una severa recesión.
Rousseff es acusada de alterar las cifras del Presupuesto y de utilizar fondos de los bancos estatales para tapar el estado tambaleante de la economía brasileña mientras buscaba su reelección en 2014.
Su juicio político marcaría el final de 13 años de liderazgo del Partido de los Trabajadores (PT) y dejaría a la mayor economía de América latina en las manos de Temer, el vicepresidente conservador de Rousseff. Se necesitan 54 votos, o dos tercios del Senado, para declarar culpable a Rousseff.
La consultora brasileña ARKO Advice dijo que entre 56 y 60 senadores están hoy a favor de impugnar a la líder izquierdista.
Rousseff aseguró que se siente “la Cenicienta” de los Juegos Olímpicos que arrancan mañana en Río de Janeiro por haber sido invitada a la apertura y no poder presidir la ceremonia. “Imagina que vas a dar una fiesta, trabajas durante varios años para la fiesta, montas las condiciones, colocas la iluminación, llamas a la prensa. Y el día de la fiesta alguien llega, toma tu lugar y se apropia de la fiesta”, expresó en una entrevista publicada por el diario español “El Mundo”.
“En esta historia de los Juegos, yo soy la Cenicienta, la invitan a la fiesta pero se tiene que ir antes, vive en las cenizas”, añadió.
La mandataria confía en que los Juegos de Río, los primeros en Sudamérica, den “una visibilidad mayor a los movimientos” a su favor, en pleno proceso de destitución. Si es absuelta, regresará a sus funciones, que actualmente asume Temer. “No solo le considero un traidor, sino también un usurpador. Conspiró para el golpe, en un proceso conducido de forma poco ética conmigo y con la población”, aseguró. (Reuters-DPA)
El impeachment ha paralizado la política brasileña por siete meses y mantiene al presidente interino, Michel Temer, en un limbo legal que ha obstaculizado sus esfuerzos por sacar a Brasil de la crisis fiscal y de una severa recesión.
Rousseff es acusada de alterar las cifras del Presupuesto y de utilizar fondos de los bancos estatales para tapar el estado tambaleante de la economía brasileña mientras buscaba su reelección en 2014.
Su juicio político marcaría el final de 13 años de liderazgo del Partido de los Trabajadores (PT) y dejaría a la mayor economía de América latina en las manos de Temer, el vicepresidente conservador de Rousseff. Se necesitan 54 votos, o dos tercios del Senado, para declarar culpable a Rousseff.
La consultora brasileña ARKO Advice dijo que entre 56 y 60 senadores están hoy a favor de impugnar a la líder izquierdista.
Rousseff aseguró que se siente “la Cenicienta” de los Juegos Olímpicos que arrancan mañana en Río de Janeiro por haber sido invitada a la apertura y no poder presidir la ceremonia. “Imagina que vas a dar una fiesta, trabajas durante varios años para la fiesta, montas las condiciones, colocas la iluminación, llamas a la prensa. Y el día de la fiesta alguien llega, toma tu lugar y se apropia de la fiesta”, expresó en una entrevista publicada por el diario español “El Mundo”.
“En esta historia de los Juegos, yo soy la Cenicienta, la invitan a la fiesta pero se tiene que ir antes, vive en las cenizas”, añadió.
La mandataria confía en que los Juegos de Río, los primeros en Sudamérica, den “una visibilidad mayor a los movimientos” a su favor, en pleno proceso de destitución. Si es absuelta, regresará a sus funciones, que actualmente asume Temer. “No solo le considero un traidor, sino también un usurpador. Conspiró para el golpe, en un proceso conducido de forma poco ética conmigo y con la población”, aseguró. (Reuters-DPA)
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