La Iglesia pidió Justicia y denunció “corrupción” e “impunidad” en el Estado

“Nos duele en lo más profundo la muerte del padre Juan (Viroche) y pedimos a la Justicia que implemente con honestidad todos los medios necesarios para esclarecer las circunstancias que la provocaron y encontrar a los responsables”, se puede leer en el comunicado de prensa que fue difundido ayer por el Arzobispado.

En una reunión, presidida por el arzobispo Alfredo Zecca, los sacerdotes de la Arquidiócesis emitieron un duro documento. En el mensaje también se puede leer: “Nos duele también inmensamente la pérdida de miles de vidas de adolescentes, jóvenes y adultos que se apagan consumidas por la droga, el alcohol y la violencia. Nos aterroriza el escándalo de la explotación sexual de menores”.

El padre Viroche venía denunciando públicamente el desarrollo del negocio de la venta de drogas y la prostitución infantil en La Florida y otras localidad del interior. Lo que llama la atención es que esa es la hipótesis que plantearon el abogado Mario Baudry y el legislador porteño Gustavo Vera, que fueron desautorizados por el Arzobispado el miércoles también a través de un comunicado de prensa emitido por la Iglesia.

“Queremos estar presentes al lado de sus luchas y también entregarles una palabra de consuelo y de esperanza en medio de tanto dolor, de tanta incertidumbre”, dijeron en el documento.

Esas palabras llegaron luego de que Zecca fuera silbado durante el velatorio del cura Viroche y en las dos marchas que se desarrollaron para exigir Justicia. En ambas situaciones le espetaron que no había cuidado al sacerdote ante las amenazas que estaba recibiendo, presuntamente, de los “transas” a los que denunciaba públicamente. A todo esto, la máxima autoridad eclesial respondió que estaban faltando a la verdad, porque él había firmado de inmediato el traslado que el fallecido religioso había solicitado para abandonar La Florida.

Además, con tono de autocrítica, se admitió que “como padres y hermanos queremos aprender a estar más cerca de cada uno de ustedes. Cerca de cada persona que tiene su vida amenazada, especialmente los niños, adolescentes y jóvenes. Queremos alimentar su pasión por la vida, sus sueños y la alegría de transformarlos en realidad. Llamamos con el corazón a todos los tucumanos a hacer lo mismo”.

Fuertes denuncias

La parte más polémica de la misiva corresponde a una denuncia pública que se realizó sobre personas “corruptas” que se encuentran en los poderes del Estado, pero sin nombrar a nadie en particular.

“No podemos dejar de lamentar y denunciar la corrupta complicidad de algunos miembros de los poderes públicos que permiten que estos delitos queden impunes y sigan creciendo hasta amenazar la posibilidad de una convivencia justa y pacífica en nuestra sociedad tucumana”, advirtieron.

Sin embargo, pese a esta situación, se dio a entender que se mantendrían cerca de la causa para evitar cualquier tipo de anomalía y que “como ciudadanos responsables, nos toca continuar exigiendo a las instituciones democráticas que destierren la corrupción, el miedo, la instalación del delito organizado”.

Por otra parte, este comunicado se dio a conocer luego de que durante toda la jornada de ayer se rumoreaba que Zecca tenía pensado presentar su renuncia. Voceros de la Iglesia decidieron no hacer declaraciones sobre este tema.