24 Diciembre 2016
ESTÁ EN TODAS. Cagna es el encargado de llevar adelante las negociaciones.
En plenos preparativos por las Fiestas y con el brindis a la vuelta de la esquina, en La Ciudadela no descansan. Trabajan sin pausa soñando un 2017 tan productivo como este 2016 que de a poco se va apagando.
Diego Cagna y compañía dividen su tiempo entre el necesario descanso, luego de un año tan agotador como positivo, y las obligaciones que tienen como cabeza de un proyecto que en Bolívar y Pellegrini esperan que siga dando frutos.
Por ese motivo, a 10 días de las vueltas a las prácticas para comenzar a pensar en lo que será la segunda parte de la temporada, en San Martín quieren cerrar cuanto antes las contrataciones de los dos refuerzos que permite el reglamento.
Y en esa materia, las negociaciones con Lucas Wilchez, el enganche que desvive al entrenador, ingresaron en un compás de espera. ¿Cuál es el motivo? Problemas netamente burocráticos.
Mientras el volante descansa en Chile, su representante, Juan Pablo Oller, negocia con Tigre su posible salida antes de tiempo. Y cuando todo parecía que iba a quedar solucionado ayer, Ezequiel Melaraña, vicepresidente segundo del “Matador”, pateó la pelota hacia más adelante.
“La reunión con Melaraña se realizará la próxima semana; quedó en confirmarme el día. Antes que eso es imposible que tomemos alguna decisión”, le contó Oller, vía WhatsApp, a LG Deportiva.
Por ese motivo, la resolución en torno al futuro del volante y su posible llegada a San Martín se conocerá pasada la Nochebuena y con el 2017 tocando la puerta.
Según explicaron allegados a la dirigencia, esa situación causó malestar en la CD, que pretende cerrar lo más rápido posible las contrataciones. Ante la necesidad de definir el tema refuerzos lo antes posible, en la mesa chica alguien tiró el nombre de Leandro Gracián. El ex volante de Vélez y Boca, entre otros clubes, está jugando en el club Rubio Ñu, de la Primera División de Paraguay. El nombre encandiló a varios en La Ciudadela, aunque desde el cuerpo técnico bajaron los decibeles.
Según explicaron, el volante creativo de 34 años nunca estuvo en la lista de los posibles candidatos. También dejaron en claro que Marcos Gelabert (sonó en las últimas horas) tampoco interesa y volvieron a repetir sus deseos: al ya conocido de Wilchez le sumaron dos volantes que juegan en Primera, pero que no tuvieron demasiado rodaje.
Por ahora no hay nada firme. Habrá que seguir esperando. Y a la hora del brindis, pedir un volante por derecha y uno creativo.
Diego Cagna y compañía dividen su tiempo entre el necesario descanso, luego de un año tan agotador como positivo, y las obligaciones que tienen como cabeza de un proyecto que en Bolívar y Pellegrini esperan que siga dando frutos.
Por ese motivo, a 10 días de las vueltas a las prácticas para comenzar a pensar en lo que será la segunda parte de la temporada, en San Martín quieren cerrar cuanto antes las contrataciones de los dos refuerzos que permite el reglamento.
Y en esa materia, las negociaciones con Lucas Wilchez, el enganche que desvive al entrenador, ingresaron en un compás de espera. ¿Cuál es el motivo? Problemas netamente burocráticos.
Mientras el volante descansa en Chile, su representante, Juan Pablo Oller, negocia con Tigre su posible salida antes de tiempo. Y cuando todo parecía que iba a quedar solucionado ayer, Ezequiel Melaraña, vicepresidente segundo del “Matador”, pateó la pelota hacia más adelante.
“La reunión con Melaraña se realizará la próxima semana; quedó en confirmarme el día. Antes que eso es imposible que tomemos alguna decisión”, le contó Oller, vía WhatsApp, a LG Deportiva.
Por ese motivo, la resolución en torno al futuro del volante y su posible llegada a San Martín se conocerá pasada la Nochebuena y con el 2017 tocando la puerta.
Según explicaron allegados a la dirigencia, esa situación causó malestar en la CD, que pretende cerrar lo más rápido posible las contrataciones. Ante la necesidad de definir el tema refuerzos lo antes posible, en la mesa chica alguien tiró el nombre de Leandro Gracián. El ex volante de Vélez y Boca, entre otros clubes, está jugando en el club Rubio Ñu, de la Primera División de Paraguay. El nombre encandiló a varios en La Ciudadela, aunque desde el cuerpo técnico bajaron los decibeles.
Según explicaron, el volante creativo de 34 años nunca estuvo en la lista de los posibles candidatos. También dejaron en claro que Marcos Gelabert (sonó en las últimas horas) tampoco interesa y volvieron a repetir sus deseos: al ya conocido de Wilchez le sumaron dos volantes que juegan en Primera, pero que no tuvieron demasiado rodaje.
Por ahora no hay nada firme. Habrá que seguir esperando. Y a la hora del brindis, pedir un volante por derecha y uno creativo.
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