29 Diciembre 2016
TRISTE. La madre de Milagros muestra fotos de la joven y de su hijo. la gaceta / foto de hector peralta (archivo)
Un joven de 21 años, vecino de “La Bombilla”, quedó detenido después de afirmar que tenía información sobre el paradero de Milagros Avellaneda y de su pequeño hijo. Ambos están desaparecidos. En la Fiscalía III sospechan que sólo buscaba quedarse con el dinero que ofrece como recompensa la familia del principal acusado, pero aún no se descarta que esté vinculado con el caso porque se negó a declarar.
Luego de ver los afiches que comenzaron a entregar los parientes de Roberto Carlos Rejas -el guardiacárcel de 30 que está en el penal de Villa Urquiza con prisión preventiva por este caso- el joven se comunicó y dijo que sabía dónde estaba la muchacha desaparecida. Cuando se le preguntó qué sabía, respondió que antes de revelar cualquier cosa pretendía que le entregaran el dinero.
Ante esta situación la familia de Rejas acudió a la Fiscalía y desde allí se ordenó que se rastreara el celular desde el cual había salido el mensaje de WhatsApp. Los técnicos lo identificaron en la zona de “La Bombilla” y hasta allí fue la Policía.
La tarea de atraparlo recayó sobre Marcelo Sallas, Ángel Villagra y Cristian Peralta, de la división Delitos contra las Personas, y Julio Fernández, de la división Trata de Personas. La medida se realizó sin ningún contratiempo y el presunto falso informante fue presentado en Tribunales. La sospecha de todos los investigadores es que sólo realizó la maniobra para quedarse con el dinero, pero aún no pueden descartar que sepa algo porque, por consejo de un defensor oficial, él se negó a abrir la boca.
El caso
La joven del barrio Lola Mora y su hijo de casi dos años fueron vistos por última vez la noche del 26 de octubre. Precisamente, la última persona que los vio fue Rejas, a quien Milagros le adjudicaba la paternidad del pequeño. En su declaración, el guardiacárcel no negó que estuvo esa noche con ambos -sí se lo había negado a la madre de ella- pero agregó que en ningún momento les hizo daño.
Los peritos que se encargan de la investigación realizaron la prueba del luminol (que busca rastros de sangre) en el auto del detenido y dio positivo. Allí también hallaron un cabello largo. Todas las muestras fueron enviadas a Buenos Aires para ser estudiadas. Por otro lado, supieron que poco después de la desaparición, Rejas había buscado en internet información sobre descomposición de cadáveres. Se lo acusa de doble homicidio agravado por alevosía y violencia de género. Su novia, Estefanía Ávila, también se encuentra detenida. La Fiscalía cree que incurrió en el delito de encubrimiento porque habría ayudado a Rejas a lavar el vehículo.
Luego de ver los afiches que comenzaron a entregar los parientes de Roberto Carlos Rejas -el guardiacárcel de 30 que está en el penal de Villa Urquiza con prisión preventiva por este caso- el joven se comunicó y dijo que sabía dónde estaba la muchacha desaparecida. Cuando se le preguntó qué sabía, respondió que antes de revelar cualquier cosa pretendía que le entregaran el dinero.
Ante esta situación la familia de Rejas acudió a la Fiscalía y desde allí se ordenó que se rastreara el celular desde el cual había salido el mensaje de WhatsApp. Los técnicos lo identificaron en la zona de “La Bombilla” y hasta allí fue la Policía.
La tarea de atraparlo recayó sobre Marcelo Sallas, Ángel Villagra y Cristian Peralta, de la división Delitos contra las Personas, y Julio Fernández, de la división Trata de Personas. La medida se realizó sin ningún contratiempo y el presunto falso informante fue presentado en Tribunales. La sospecha de todos los investigadores es que sólo realizó la maniobra para quedarse con el dinero, pero aún no pueden descartar que sepa algo porque, por consejo de un defensor oficial, él se negó a abrir la boca.
El caso
La joven del barrio Lola Mora y su hijo de casi dos años fueron vistos por última vez la noche del 26 de octubre. Precisamente, la última persona que los vio fue Rejas, a quien Milagros le adjudicaba la paternidad del pequeño. En su declaración, el guardiacárcel no negó que estuvo esa noche con ambos -sí se lo había negado a la madre de ella- pero agregó que en ningún momento les hizo daño.
Los peritos que se encargan de la investigación realizaron la prueba del luminol (que busca rastros de sangre) en el auto del detenido y dio positivo. Allí también hallaron un cabello largo. Todas las muestras fueron enviadas a Buenos Aires para ser estudiadas. Por otro lado, supieron que poco después de la desaparición, Rejas había buscado en internet información sobre descomposición de cadáveres. Se lo acusa de doble homicidio agravado por alevosía y violencia de género. Su novia, Estefanía Ávila, también se encuentra detenida. La Fiscalía cree que incurrió en el delito de encubrimiento porque habría ayudado a Rejas a lavar el vehículo.
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