El 2017 para el mundo comenzó con la asunción del nuevo secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el portugués António Guterres. Además se sumó como miembro no permanente de la entidad Bolivia. la
El funcionario manifestó en su primer día en el cargo un oscuro panorama de la situación política e instó a los Gobiernos a la paz, el diálogo y el respeto.
Según declaró Guterres, le preocupa sobre todo una cuestión: cómo ayudar a las millones de personas que sufren en la guerra sin que haya novedades de que ésta acabe.
"Nadie gana estas guerras, todos pierden. Billones de dólares se emplean en destruir sociedades y economías, alimentando ciclos de desconfianza y miedo que pueden prolongarse durante generaciones", agregó.
La sede de Naciones Unidas permanece cerrada el fin de semana y en Estados Unidos la festividad del 1 de enero se traslada al lunes, por lo que Guterres no se instalará hasta el martes en su oficina. El nuevo secretario general de la ONU, de 67 años, está considerado un eficaz negociador y habla fluidamente cuatro idiomas.
Por otra parte, Bolivia se sumó como miembro no permanente a la organización, un puesto que no ocupaba desde 1979 que ejercerá los próximos dos años y para el que fue elegido con el aval del grupo de países de Latinoamérica y el Caribe con el respaldo de 183 de los 193 Estados miembros.
El bienio 2017-2018 será el tercero del país latinoamericano en el máximo órgano de decisión de la ONU, del que ya formó parte entre 1978 y 1979 y entre 1964 y 1965. Bolivia reemplaza a Venezuela como uno de los dos representantes de Latinoamérica y el Caribe dentro del Consejo de Seguridad, donde continúa por un año más Uruguay.
"Desde el Consejo de Seguridad, Bolivia será la voz de los pueblos del mundo y luchará por construir un planeta sin invasores ni invadidos", escribió hoy el mandatario boliviano Evo Morales en su cuenta en la red social Twitter. (Télam)