Visto bueno para el proyecto de expropiación de la Casa Sucar

La Comisión de Hacienda y Presupuesto del Consejo Deliberante, se reunió ayer, por primera vez en el año, con la consigna exclusiva de analizar el proyecto del intendente, Germán Alfaro, que propone la expropiación de la Casa Sucar en carácter de su utilidad pública y la venta de un inmueble municipal para solventar la adquisición.

El presidente de la comisión, el concejal José María Franco, declaró: “es un tema que le interesa a un sector importante de la sociedad y que está luchando por su preservación. Tengo entendido que las demás comisiones han comenzado a darle dictámenes y se está programando para este viernes una sesión extraordinaria”. Declaró que las respectivas comisiones de Planeamiento y Obras Públicas, y Petición de Poderes, dieron el visto bueno al proyecto en discusión. “Hoy nos toca a Hacienda para ver la parte económica, los recursos que hacen falta para contener la expropiación de la casa”, dijo el concejal.

El edil también contó que se está llevando a cabo una negociación, por parte del Ejecutivo municipal, con la empresa dueña de la casona Sucar, y dijo tener conocimiento de que se vendería la propiedad de la calle Buenos Aires porque la empresa solicita el dinero que invirtió para la expropiación. Recordó también que, anteriormente, la firma propietaria no aceptó la oferta de permuta ofrecida por el municipio. Por otra parte, el secretario de gobierno del municipio, Walter Berarducci, quién también participó de la reunión, se mostró esperanzado con el proyecto: “esperamos que nos den los números suficientes, está la voluntad de parte de los concejales, y la buena predisposición, y nosotros compartimos el espíritu y el tenor de la ordenanza”.

Se expresó también acerca de otro tema que ronda por la opinión tucumana: la ordenanza que cambiaría el nombre de la avenida Néstor Kirchner por su nombre anterior, Julio A. Roca. “Creo que nos tenemos que abocar a temas importantes para la ciudad, para mí no es un tema relevante, pero son los concejales los representantes del pueblo, y quienes fijan la agenda propia del cuerpo. Personalmente, considero que es el tiempo quien juzga, y el Concejo debe dejar pasar un tiempo prudente a los fines de que sea la historia quien diga quién merece, o no, llevar su nombre en la calle, en un paseo, o en un parque de la ciudad”, expresó.