Más muertos por la represión policial de Maduro
En las marchas contra el Gobierno, los que protestan arrojan “bombas” con excrementos humanas contra los policías. Piden elecciones y rechazan la Constituyente. Un manifestante falleció ayer en la zona de Las Mercedes, mientras que otro pereció por los disparos que recibió el lunes en Mérida.
CARACAS.- La policía venezolana dispersó con gases lacrimógenos una nueva manifestación contra el Gobierno venezolano que intentaba llegar a la sede del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) para exigir respeto a la Constitución, en la continuación de las protestas que comenzaron hace cinco semanas.
La llamada “Marcha de los Escudos”, cuyos manifestantes portaban escudos de madera y cartón con copias de la portada de la Constitución pegadas al frente, fue detenida en su camino al TSJ, que fue rodeado por fuerzas de seguridad. Varios vehículos blindados fueron estacionados en la autopista cercana para detener la marcha, que por undécima vez en cinco semanas avanzó, sin éxito, hacia el centro de Caracas.
La manifestación principal salió de la plaza Altamira, en el este de Caracas, y fue esperada en una autopista por el cordón policial que arrojó bombas lacrimógenas para dispersarla.
Al frente de la marcha iba un grupo de manifestantes con escudos fabricados de madera, cartón y metal, con los que apenas contenían los disparos de bombas lacrimógenas. Varios miles de personas llegaron hasta la autopista desde Chacao, pero otros dos puntos de concentración en el centro de la ciudad fueron dispersados por la policía.
Civiles armados
El diputado opositor Juan Miguel Matheus denunció que un grupo de civiles armados disparó en uno de los puntos de concentración donde se reunirían los opositores. Su colega Gaby Arellano denunció que los agentes de la Policía Nacional no actuaron contra los paramilitares y permitieron que atacaran a los manifestantes. En el incidente, el diputado Jorge Millán fue golpeado por la policía, cuando trató de defender a un manifestante.
Asimismo, el diputado Biaggio Pilieri, quien estaba al frente de la marcha, tuvo que retroceder por efecto de los gases. “Este es un Gobierno que no entiende que perdió el respaldo popular, que dio un autogolpe con el TSJ y continúa convocando una ilegal Asamblea Constituyente”, dijo.
El legislador recordó que las protestas comenzaron el 4 de abril, como reacción de rechazo contra dos sentencias del Tribunal que despojaron a la Asamblea Nacional (Congreso) de sus atribuciones y ahora el Gobierno propuso una Asamblea Constituyente que busca desconocer al Poder Legislativo.
“Hoy (por ayer) el pueblo salió nuevamente a la calle a exigir que se respete la Constitución. Los venezolanos tenemos derecho a elegir nuestro futuro. El Gobierno debe entender que mientras más bombas lance contra nosotros, más vamos a seguir en la calle protestando. El pueblo no va a parar”, aseveró. La oposición continuará con sus manifestaciones para exigir la restitución del orden constitucional. Para mañana convocó a una marcha de abuelos.
Guerra total
A los enfrentamientos cotidianos entre opositores venezolanos y policías militares se sumó ahora un arma insólita. Se trata de las denominadas “bombas popotov”, cuyo nombre es un neologismo que surge de la fusión entre las “bombas molotov” y el contenido de estos dispositivos, que no consiste en un líquido inflamable sino en excremento humano.
Algunas fueron confeccionadas utilizando bolsas de plástico o envases de cristal que llevan en sus tapas etiquetas con mensajes como “fuera Maduro”, “elecciones ya” o “No a la represión”.
A través de las redes sociales se dan instrucciones para armar las “popotov” con las cuales la oposición busca “neutralizar” a las fuerzas de seguridad. “Barato, efectivo y contundente. Arma tu bomba de excremento y úsala como defensa”, se lee en uno de los mensajes viralizados. (DPA/Télam/el.nacional.com/eluniversal.com)
Mortalidad infantil
La mortalidad infantil en Venezuela aumentó un 30% el año pasado, la tasa de mortalidad materna se disparó un 65% y los casos de malaria crecieron un 76%, según datos del Gobierno que reflejan cómo la crisis económica ha golpeado la salud de la población. También hubo un salto en enfermedades como la difteria y el virus de Zika.