Roces por el manejo de la información judicial

Rosenkrantz y Lorenzetti cruzaron críticas.

10 Octubre 2018

BUENOS AIRES.- El día del debut en sociedad de Carlos Rosenkrantz como presidente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación terminó eclipsado por una disputa entre ese ministro, y su par y antecesor en la conducción del máximo estrado del país, Ricardo Lorenzetti. Ambos cruzaron acusaciones por el manejo del Centro de Información Judicial (CIJ). Rosenkrantz atribuyó a Lorenzetti el desmantelamiento de la oficina que dirigía María Bourdin tras ser expulsado de la presidencia. A continuación, el ex titular asignó a su sucesor la intención de generar un “escándalo” y lo achacó a su “mediocridad”.

Este intercambio sucedió en simultáneo con la apertura de la conferencia del J-20, reunión de magistrados organizada por la Corte de la Nación como actividad de preparación del próximo encuentro del G-20. En esas circunstancias y durante su primer discurso público como jefe del tribunal, Rosenkrantz afirmó que la independencia y la imparcialidad deben ser las virtudes cardinales de los jueces.

El conflicto respecto del CIJ quedó a la vista durante la mañana, con la publicación de una resolución en la que Rosenkrantz responsabilizaba a Lorenzetti por haber dejado acéfala esa dependencia al disponer el traslado de 12 agentes, entre ellos Bourdin. El presidente de la Corte advirtió que aún no tenía el control del CIJ. Por la tarde, Lorenzetti afirmó que su sucesor quería provocar “miedo y tensión”, y que incurría en amenazas telefónicas y faltas de respeto. “Lamento muchísimo semejante mediocridad”, expresó. (Especial)

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