¡Tocala, Cabral!

Mientras la tribuna le pide que despeje, Zielinski apoya el riesgo que toma al salir jugando.

CONFIADO, SIEMPRE. Cabral lucha la pelota con Jonás Romero, durante un entrenamiento. El defensor no le teme nunca a la posibilidad de salir jugando y entregar la pelota al pie de sus compañeros. la gaceTA / FOTO DE Ines Quinteros Orio CONFIADO, SIEMPRE. Cabral lucha la pelota con Jonás Romero, durante un entrenamiento. El defensor no le teme nunca a la posibilidad de salir jugando y entregar la pelota al pie de sus compañeros. la gaceTA / FOTO DE Ines Quinteros Orio
13 Noviembre 2018

¿Salir jugando o reventarla? Siempre hay espacio en el andar de un equipo y su entrenador para preguntarse esto. Ya sea a partir de que toma una u otra postura o simplemente al inicio de un torneo de la llegada del técnico. En el caso de Atlético, quizás se trate de un caso particular: Jonathan Cabral.

En el partido del viernes, desde las tribunas del Monumental le pedían al defensor en repetidas ocasiones que despejara la pelota lejos, en vez de salir jugando.

En una ocasión, el defensor recuperó; la tiró larga y terminó cometiendo infracción. Luego de esa secuencia, pudo haber llegado el gol del empate de Central aunque finalmente no pasó.

“Cabral arriesga en las salidas porque nosotros intentamos salir jugando desde la defensa; además en ese partido (contra Rosario Central), no nos presionaban. Me gusta que arriesgue”, lo defendió Ricardo Zielinski.

Es cierto que esa jugada fue la única en la que verdaderamente Atlético padeció la forma de salir de su propio arco. En el resto del partido pudo completar la tarea que les encomienda el entrenador: arriesgar en las salidas pero para no arriesgar la pelota con un pelotazo.

De todas maneras, la defensa de Atlético tiene otros jugadores que no tienen problemas en “revolearla”. Bruno Bianchi y los laterales quizás no son tan apegados a esa idea. Cristian Lucchetti, un poco más atrás, tiene una probada destreza con los pies y también acude a pases cortos para las salidas.

Y así como Cabral tiene la bendición de Zielinski, el resto también. Atlético se ha caracterizado por salir por abajo cuando puede y quiere y por reventarla cuando es necesario. “¡Sacala, Cabral!”, se seguía escuchando incluso después del partido pero el defensor mantuvo su postura.

Adelante, los mediocampistas y delanteros esperan agradecidos ya que la pelota les llegará más limpia. Los hinchas, quizás tengan que sufrir un poco más en la tribuna pero Zielinski ya habló e intentarán darles tranquilidad pidiendo que Cabral la toque, no que la saque.

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