El "Tucu" Palacios: "me costó dormir de tanta felicidad"

Exequiel Palacios vive entre la alegría de haberle ganado a Boca una final histórica y la expectativa por el Mundial de Clubes. Si bien todo indica que su futuro está en el fútbol grande de Europa, el tucumano prefiere disfrutas el momento.

INSEPARABLES. Exequiel junto a la Copa Libertadores, con la que soñó durante mucho tiempo. Ahora, va por la del Mundial.  INSEPARABLES. Exequiel junto a la Copa Libertadores, con la que soñó durante mucho tiempo. Ahora, va por la del Mundial.
11 Diciembre 2018

Con apenas 20 años, todo lo que ha vivido Exequiel Palacios hasta ahora es nada a comparación de todo lo que le queda por vivir. Lo que conoce es mucho menos que lo que le queda por descubrir. Sin embargo, dentro de todo ese margen de expectativa e incertidumbre, Exequiel es dueño de una certeza: su nombre forma parte de una hazaña que se recordará por siempre, y no sólo en el mundo River. Ganarle a Boca en una final de Copa Libertadores, aunque fuera a miles de kilómetros del Monumental, es algo que difícilmente vuelva a repetirse en este siglo, por la cantidad de variables que deben converger para que ambos vuelvan a cruzarse en la llave decisiva del máximo torneo continental. Era una oportunidad única y fue River el que la aprovechó.

“Somos conscientes de que quedamos en la historia del club. Esto se va a quedar para siempre en la cabeza del hincha de River”, se hizo cargo el nacido en Famaillá, que vivió con la ansiedad de un pibe de inferiores la interminable procesión que fue la Superfinal.

“No se terminaba más. Se hizo eterno, la verdad. Y no sé si se disfruta tanto, por la tensión que se vive en esta clase de partidos. Más cuando uno es chico y siente más la presión. Por suerte en este plantel hay gente grande a la que escuchamos y que nos enseña en todo sentido. Estoy muy feliz por el triunfo, me costó dormir de tanta felicidad”, aseguró Exequiel.

Con el aliento de sus padres en la tribuna y el del resto de su familia en Tucumán, el talentoso volante pudo levantar su primera Copa Libertadores y confirmar que no se había equivocado al decidir quedarse en River pese a que en su momento Marcelo Gallardo le había dicho que no lo tendría en cuenta.

“Es un orgullo para mí y mi familia. Ellos están todos contentos, porque somos todos de River. Ganarle a Boca en una final es algo tremendo”, resaltó.

Madrid espera

El tema del interés de Real Madrid es recurrente, sobre todo porque la final se jugó en el Bernabéu y por la posibilidad de enfrentar al “Merengue” en la final del Mundial de Clubes, pero Exequiel lo despeja cada vez con la presteza y tranquilidad de un defensor experimentado.

“Como digo siempre, soy un chico tranquilo. Mi cabeza está en River. soy feliz donde estoy, disfruto de cada día y de cada entrenamiento. Trato de pensar en eso y en nada más”, asegura.

Por otra parte, Exequiel prefiere no adelantarse. Paso a paso fue que River llegó a la final de la Copa, y conviene tener presente que para jugar con Real Madrid la final el Mundial de Clubes, primero hay que ganar el choque de semifinales frente a Espérance de Túnez, Al Ain de Emiratos Árabes o Team Wellington de Nueva Zelanda. “Hay que seguir dando lo mejor. Quizás cuando estemos allá, empecemos a entender realmente lo que hemos logrado”.

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