Piñera reorganiza su gobierno, pero sigue la rebelión

SANTIAGO, Chile.- El presidente chileno, Sebastián Piñera removió a sus ministros de Interior y de Hacienda, como parte de un ajuste a su gabinete de gobierno, en respuesta a las protestas que sacudieron al país en los últimos días.

La medida, sin embargo, no calmó la rebelión en curso en el país, que ya lleva 11 días, con 20 muertos, cientos de heridos y más de un millar de detenidos.

A la misma hora que Piñera hacía estos anuncios, se registraron violentos enfrentamientos entre manifestantes y la policía, frente a la sede del gobierno, el Paladio de la Moneda, en Santiago de Chile.

“Chile no es el mismo que teníamos hace un par de semanas. Chile cambió y el Gobierno también tiene que cambiar para enfrentar estos nuevos desafíos y tiempos”, admitió Piñera al hacer pública su decisión de modificar el gabinete.

Entre los ministros salientes está un primo del presidente, Andrés Chadwick, cuyo desempeño en la cartera de Interior fue repudiada por las multitudes que protestaron en Chile y cuya salida del gobierno fue reclamada en decenas de manifestaciones en todo el país.

Los anuncios se conocieron cuando en Santiago y en las principales ciudades chilenas parecía retornar la tranquilidad, luego de la anulación de los estados de emergencia que entregaron a las Fuerzas Armadas el control de la seguridad y el orden público. Pero pronto las protestas volvieron a tomar la Alameda de la capital chilena, en la zona cercana cercana a Plaza Italia, y el centro de la ciudad portuaria de Valparaíso.

Detonaciones, gases lacrimógenos y gritos contra los carabineros y militares resonaron en el centro de la capital, donde también se registraron algunos saqueos. Ante el avance de los carros hidrantes, se armaron barricadas y fogatas frente a la Biblioteca Nacional.

La violencia de la respuesta oficial a las manifestaciones es motivo de denuncias. El Frente Amplio y del Partido Comunista harán una acusación constitucional contra Piñera y Chadwick, por sus responsabilidades frente a las denuncias por violaciones a los derechos humanos durante el Estado de Emergencia y los toques de queda que rigieron por varios días. (Télam)