Analizaron el uso de recursos genéticos

En el marco del Proyecto PNUD ARG 16/G54 “Promoviendo la Aplicación del Protocolo de Nagoya sobre ABS en Argentina”, se realizaron en Buenos Aires las Jornadas de Capacitación y Trabajo sobre Autorizaciones de Acceso, Negociaciones y Contratos de ABS. En representación de Tucumán asistió al evento Julieta Loi, técnica de la Subdirección de Ordenamiento Territorial de Bosques Nativos.

En las Jornadas se buscó fortalecer las capacidades institucionales existentes a nivel provincial en materia de acceso a los recursos genéticos y de participación justa y equitativa en los beneficios que se deriven de la utilización de los ABS. Otro de los objetivos tenía que ver con trabajar en los enfoques regulatorios vigentes, con el fin de actualizar las disposiciones existentes a lo que prevén el Protocolo de Nagoya y las resoluciones 387/2019 y 410/2019. También se trabajó sobre los requisitos, sobre las autorizaciones de acceso, sobre las condiciones mutuamente acordadas para el uso de los recursos genéticos. Finalmente, también se buscó atender los compromisos asumidos a nivel internacional en el marco del Convenio sobre la Diversidad Biológica (CDB) y el Protocolo de Nagoya.

Del evento participó el español Alejandro Lago, experto en temas de acceso a los recursos y repartición justa de los beneficios. De las jornadas surgieron algunas necesidades; por ejemplo, la de implementar en las provincias el documento nacional para la implantación en las jurisdicciones, el documento modelo de autorización de acceso (CFP), el documento modelo de contrato comercial, el protocolo comunitario para comunidades indígenas, entre otros.

En ese sentido, se acordó que la Nación redactará modelos de estos documentos, para que todas las provincias actúen de igual manera y para que los requisitos y los formularios para la colecta y acceso a los recursos genéticos sea homogéneo en todas las jurisdicciones.

De interés local

El Protocolo de Nagoya es un tratado internacional sancionado en 2010 y firmado por 123 países. Tiene como objetivo la repartición justa y equitativa de los beneficios que deriven del uso de los recursos genéticos.

Es una continuación del Convenio de la diversidad biológica, cuya incumbencia es el resguardo de la biodiversidad.

Argentina es país firmante desde el 2017. A partir de entonces, la Secretaría de Ambiente de la Nación viene capacitando anualmente a las provincias, para que desarrollen sus legislaciones según lo establecido en este protocolo. En este marco, Tucumán se encuentra en vías de actualizar su legislación vigente, para cumplir con los lineamientos establecidos en el Protocolo de Nagoya.

El mes pasado, el Gobierno de Tucumán firmó su primer contrato comercial que autoriza a la utilización de un recurso genético propiedad de la Provincia, para un desarrollo comercial en la industria alimenticia, que otorgará regalías económicas. En esta línea, la Subdirección de Ordenamiento Territorial de Bosques Nativos considera de fundamental importancia que Tucumán se alinee a lo solicitado internacionalmente por el Protocolo de Nagoya, ya que el uso y acceso a los recursos genéticos deber ser regulado con el objetivo de la protección de la biodiversidad. Los beneficios de esta implementación pueden ser económicos -acceso a regalías- y no económicos -capacitación y puesta en valor de los recursos naturales disponibles en la provincia.