LA PAZ, Bolivia.- Tras una visita oficial la semana pasada a Bolivia, una delegación de la Comisión de Ciudadanía y Derechos Humanos del Parlasur, el parlamento del Mercosur, denunció “la participación de las Fuerzas Armadas produjo 32 víctimas fatales, 832 heridos y 1513 detenidas”, desde el derrocamiento del gobierno de Evo Morales.
La comisión denunció “declaraciones, discursos y ataques de odio racial dirigidos a los pueblos indígenas del país, principalmente a sus mujeres y sus símbolos”; además, de “graves amenazas, ataques físicos y a las viviendas dirigidas a líderes, asambleístas y dirigentes sociales, funcionarios y funcionarias y dirigentes de instituciones independientes del Estado, y los organismos nacionales de promoción y protección de los derechos humanos”.
Además, mostró preocupación por la decisión del gobierno de Jeanine Áñez, de “no otorgar salvoconducto a dirigentes que se encuentran con asilo en embajadas” -como la mexicana- y por “la persecución a periodistas nacionales y extranjeros”, como pasó con equipos de televisión argentinos.
La delegación, compuesta por los legisladores Cecilia Merchán, de Argentina; Ricardo Canese, de Paraguay; Carlos Reutor, de Uruguay; y Fernanda Melchionna, de Brasil; y el secretario de Relaciones Internacionales del parlamento regional, Luis Seara, estuvo en Bolivia el jueves y viernes y se reunió con los sectores políticos constituidos en la Asamblea Legislativa, organizaciones de derechos humanos, la Defensoría del Pueblo y las víctimas y familiares de víctimas de la represión.”
En su página web, difundió un resumen de las violaciones a los derechos humanos que pudieron confirmar y una serie de propuestas para reencauzar el proceso constitucional en el país andino.
Llamó a un “avance en el diálogo de todos los actores políticos y sociales democráticos del Estado Plurinacional de Bolivia” y del cronograma electoral alcanzado por acuerdo de los bloques de la Asamblea Legislativa”. (Télam)