El partido contra Boca apareció en el camino de Atlético en el peor momento, justo en el medio de la serie con The Strongest por la fase 2 de la Copa Libertadores.
Por ese motivo, y tras el 0-2 encajado en La Paz, Ricardo Zielinski había decidido poner mayoría de suplentes en La Bombonera. La idea del DT era preservar la mayor cantidad de futbolistas posibles para intentar revertir la historia contra los bolivianos.
Y en el seno de la delegación “decana” el pensamiento era idéntico. Atlético jugó el duelo de anoche con la cabeza puesta en el “Tigre”, que justamente ayer hizo lo propio por el torneo de su país (presentó un mix y cayó 1-0 como local ante Jorge Wilstermann). “Tenemos un partido muy importante el miércoles y es muy difícil sacarlo de la cabeza”, admitió Cristian Lucchetti, minutos antes de enfrentar al “Xeneize”.
Con sus declaraciones en la previa, “Laucha” también daba cuenta que el cerebro de Atlético estaba más en Tucumán y en el “José Fierro” que en La Boca. “Llegamos el jueves desde La Paz. Son viajes cansadores y no tenemos un plantel tan largo para afrontar tantos partidos seguidos, difíciles e importantes”, explicó. Tomando esas palabras, no fue nada difícil elegir la prioridad en este caso. “Jugar la Copa es algo de todos los años; cuesta muchísimo. Por eso este es un desafío importantísimo”, remató el arquero, antes de lamentar el resultado. “Tuvimos un sólo entrenamiento con este equipo y jugamos de igual a igual”.
Así las cosas anoche, ni bien Mauro Vigliano pitó el final del duelo, en el “Decano” se enfocaron de lleno en un duelo que nunca dejó de estar en su cabeza.
A las 13 el grupo volará hacia nuestra provincia y se entrenará por la tarde en el complejo “José Salmoiraghi”, porque pese a perder ayer, lo más importante está a la vuelta de la esquina.