Hoy comienza en la provincia una nueva etapa de la cuarentena obligatoria por el coronavirus: Tucumán deja atrás el aislamiento para pasar al distanciamiento social, con nuevas actividades habilitadas y la posibilidad de reunirse en familia. No bajar los brazos con las medidas de prevención sigue siendo la clave para evitar contagios y la propagación del virus.
Tras 80 días de mantener sus puertas cerradas, gimnasios, cibers, bares y restaurantes vuelven a recibir a sus clientes. Para poder retomar la actividad, cada sector presentó un protocolo específico de bioseguridad, que debió ser aprobado por el Comité Operativo de Emergencia (COE).
El Gobierno, si bien continuará con los controles, apela a la responsabilidad ciudadana para mantener esta ‘nueva normalidad’ bajo control. “Nosotros apelamos una vez más a la conciencia social, al cumplimiento de los protocolos por parte de cada uno de los sectores y especialmente de las autoridades y las instituciones que los representan”, enfatizó Carolina Vargas Aignasse, ministra de Gobierno y Justicia de la provincia.
“El buen resultado que hoy tenemos es gracias al esfuerzo que viene haciendo toda la comunidad”, advirtió la Ministra.
En dos semanas, el Ministerio de Salud realizará una evaluación para ver qué impacto tuvo la apertura de las nuevas actividades en la situación epidemiológica de la provincia. “Estas dos semanas van a ser decisivas para poder seguir con la flexibilización o tener que volver atrás”, apuntó la ministra de Salud de la provincia, Rossana Chahla. “La población tiene que ser consciente de que en cualquier lugar puede producirse un brote si no se cumplen con los recaudos; tenemos sobradas muestras de que esto puede darse, y hay que tener mucho cuidado para poder detectarlo”, manifestó.
Juntos, pero con cuidado
A partir de hoy, y luego de tanto tiempo sin verse, los tucumanos pueden reencontrarse con sus familiares y amigos, en reuniones de no más de 10 personas en las que es de suma importancia mantener el distanciamiento. Cada persona debe utilizar sus propios utensilios para evitar contagios.
“Pedimos que tengan mucha prudencia, que apliquen un criterio bastante restrictivo para evitar cualquier problema”, afirmó Vargas Aignasse.
Las precauciones deben extremarse aún más si formarán parte de estas reuniones personas que trabajen en la atención al público o sean personal esencial por la tarea que cumplen. Se recomienda que, en la medida de lo posible, estas personas no participen de los encuentros.
“La persona que está en contacto con el público pueden llegar a tener el virus y estar asintomáticas. En la provincia no se registró circulación viral del coronavirus, pero si ha tenido contacto con otra persona que si ha tenido contacto estrecho con alguien con covid puede haberse contagiado y contagiar a otros”, explicó la ministra Chahla.
“Entonces, las personas que por sus tareas están en un contacto permanente, -como quienes trabajan en supermercados, en una farmacia o el personal de salud- lo más importante es que cuando hagan esas reuniones tengan el distanciamiento que corresponde”, añadió.
Se recomienda además que las personas que integran los grupos de riesgo por el coronavirus traten de abstenerse de participar de estos encuentros, en especial los adultos mayores. “Si bien están permitidas las reuniones, les pedimos que no expongan a sus seres más queridos, a las poblaciones más vulnerables”, advirtió Vargas Aignasse.
Actividad gastronómica
Los bares y restaurantes de la provincia pueden recibir a sus clientes hoy a partir de las 17, pero sólo en mesas al aire libre y a una distancia de 1,5 metros entre cada una. Desde el sector anunciaron que esa modalidad no les era conveniente y que muchos locales no abrirán a pesar de la flexibilización.
“Trabajar en un horario en el que no hay ninguna posibilidad de que venga gente y que solo se utilice el aire libre no es una alternativa, no vamos a abrir en esas condiciones”, había expresado el presidente de la Unión de Hoteles, Bares y Restaurantes de Tucumán, Ernesto Gettar.
Desde el Gobierno advirtieron que comprenden que la situación no es la más conveniente para el sector gastronómico, pero que la apertura debe ser gradual. “Esto no obedece ni a cuestiones comerciales ni a económicas, sino son de índole sanitaria. La idea es poder testear cual es el impacto que esto tiene y la semana que viene, a partir del 15 de junio, si el resultado es positivo -como lo venimos haciendo- ampliaríamos a la actividad”, afirmó la Ministra de Gobierno.
“Hay que tener en cuenta que todas estas actividades que se exceptuaron también impactan en otro aspecto: la recarga del transporte público”, añadió.