Alberto Fernández palmeó con afecto al gobernador de Formosa, en medio de la crisis de la provincia por las restricciones sanitarias, las protestas y la represión.
El gobernador de Formosa, Gildo Insfrán, cuestionado por la represión policial que siguió a las protestas por sus estrictas medidas contra el coronavirus, visitó hoy la Casa Rosada. Y más allá de cierta incomodidad en algunos funcionarios y algún “reto” desde Balcarce 50, el hombre del poder en la provincia norteña se llevó un gesto explícito de respaldo del Presidente.
El mandatario formoseño, que lleva 25 años ininterrumpidos en el poder, participó en el Museo del Bicentenario de Casa Rosada de la firma del “Acuerdo Federal para una Argentina Unida contra la violencia de género”, junto a otros once gobernadores. El apoyo llegó cuando subió al estrado a firmar el pacto: se acercó a Alberto Fernández, que lo palmeó afectuosamente, mucho más que al resto de los mandatarios.
También participó del acto la ministra de Justicia, Marcela Losardo, cuya continuidad en el cargo está amenazada. Losardo fue ubicada en la primera fila, junto al gobernador Áxel Kicillof. Originalmente, su presencia no estaba prevista hoy, lo que terminó transformándose en un nuevo gesto de apoyo. Al terminar el acto, no solo compartió charla y foto con distintas mujeres funcionarias, sino que se sumó a la foto grupal con el Presidente. Losardo y Fernández charlaron un par de minutos, barbijo de por medio pero muy cerca, antes de retirarse. Insfrán y Losardo se cruzaron, incluso, en el salón principal, pero no se dirigieron palabra.
Luego del acto-estuvo sentado entre sus pares Juan Manzur (Tucumán) y Gerardo Zamora (Santiago del Estero)-Insfrán charló largo y tendido con distintos funcionarios.