¿Patrimonio nacional o provincial? La Casa Histórica merece un debate

El museólogo Gabriel Miremont brindó su opinión en una entrevista publicada el domingo pasado en LA GACETA: “debe pertenecerle a Tucumán, no a la Nación”, sostuvo. El tema alcanzó una llamativa repercusión.

"Es importante que tengamos opinión"

Gabriela Logiúdice

Arquitecta-especialista en patrimonio

La Casa Histórica no es nuestra ni de Buenos Aires, es de todos, no corresponde ese tironeo entre lo mío y lo tuyo. Sí es importante que los tucumanos tengamos opinión sobre lo que allí se haga y una manera es declararla Monumento Histórico Provincial, pero no en forma individual, sino en el marco de una ley paraguas. Por ejemplo, la Casa de Gobierno también es Monumento Histórico Nacional, pero no Provincial. La Comisión de Patrimonio envió ese proyecto, pero está cajoneado en la Legislatura. En fin, el escaso interés que tienen allí por el patrimonio se refleja en que la Legislatura no manda su representante a la Comisión desde 2019.

Con estas herramientas se pueden acordar reglamentaciones operativas en las que participen Nación y Provincia. No se trata sólo de una cuestión administrativa, hablamos de un valor histórico y arquitectónico que pertenece a todos los argentinos. La cuestión es ponerse de acuerdo, en lo personal no me gustó mucho el planteo del guión museográfico, y esas cosas se pueden debatir.

"Sería sacarla del relato de la historia"

Claudia Epstein

Licenciada en artes-ex directora del MUNT

Tucumán está en condiciones de gestionar la Casa Histórica, pero no me parece lo más adecuado. Hay una lectura del conjunto de los museos nacionales y separar a la Casa Histórica sería como sacarla del relato de la historia argentina, así que estratégicamente no es una buena decisión. La Batalla de Tucumán y el 9 de julio de 1816 son hitos fundamentales de la Independencia argentina y forman parte de la construcción de la identidad nacional.

Hay distintas formas de gestionar, pero los fondos -ya sea que vengan de la Nación o de la Provincia- nunca son suficientes ni alcanzan para lo que uno quisiera hacer. Por eso es importante destacar que las pequeñeces administrativas no son las que determinan si la administración debe estar en Tucumán o en Buenos Aires.

Lo que se puede considerar es una gestión compartida entre Nación y Provincia. No olvidemos que quienes trabajan en la Casa Histórica son tucumanos, conocen los códigos culturales de Tucumán, saben vincularse con el turismo, con instituciones privadas y con otros museos-casa que completan nuestra historia. Es más, hay piezas del patrimonio en reserva en la Casa Histórica y tal vez estarían mejor en otros museos.

"No puede digitarse todo de Buenos Aires"

Oscar Pavetti

Historiador

Pienso que la Casa Histórica debe depender de la Provincia de Tucumán porque es patrimonio de los tucumanos y además se trata de una cuestión de federalismo, no puede digitarse todo desde Buenos Aires. La Declaración de la Independencia es un gran orgullo que tenemos y seguimos sintiendo, y justamente es en la Casa Histórica donde reflejamos nuestro localismo, nuestra tradición tucumana.

Pongo el ejemplo del Cabildo de Buenos Aires. Los que actuaron allí eran porteños y es justo que lo administren en CABA. Bien, la Casa Histórica representa una situación tucumana que desde Buenos Aires no se debe manejar.

"Sumarla complicaría más las cosas"

Ricardo Salim

Arquitecto-especialista en patrimonio

Creo que sería engorroso que la Casa Histórica pase a depender de  Tucumán, ya sea de la Provincia o de la Municipalidad, porque tiene una envergadura y un valor simbólico que van más allá de la administración (contando con que hubo épocas buenas y malas en lo referido al mantenimiento).

Tenemos que hablar en términos realistas y quienes trabajamos con los edificios públicos sabemos lo que cuesta que alcancen los presupuestos, así que sumar a la Casa Histórica complicaría un poco más las cosas en ese sentido.

La Casa merece ser nacional. El museo cuenta con bienes que se cuidan celosamente -de hecho está pedido que desde Buenos Aires se envíe el tintero de Laprida-, además hay áreas de restauración y un taller de reparación de pinturas, todo manejado por la Nación y que funcionan muy bien. En estos momentos se lanza la licitación para realizar obras en el segundo patio, donde hay sanitarios y talleres, una iniciativa en la que hemos colaborado.

Y otra cosa: la Casa Histórica está en Tucumán y es un símbolo de Tucumán, quienes la visitan no se ponen a distinguir quién la administra.

"Serviría una gestión mixta y negociada"

Eduardo Ribotta

Museólogo-arqueólogo

Lo que corresponde es una administración mixta, porque si bien la Casa Histórica es de todos los argentinos y argentinas nada debería modificarse sin la participación de Tucumán. De hecho, y con todo el respeto que me merecen, en los últimos guiones intervinieron historiadores que no son de aquí o que no viven aquí, lo mismo con la museografía. Es algo que debería cambiar, en Tucumán tenemos gente por demás capacitada, en historia y en museos, especialistas que son doctores y están en el Conicet. ¿Por qué tienen que venir de afuera a hacer ese trabajo? Con el mismo criterio, deberían convocar tucumanos, cordobeses o chubutenses para hacer lo mismo en el Cabildo de Buenos Aires.

Una gestión mixta, negociada, serviría para establecer un orden de prioridades más cercano a la cotidianeidad. El contacto con el público es clave, si no se trabaja con las comunidades un museo pierde su razón de ser. Y son los trabajadores de la Casa Histórica los que tienen ese contacto y quienes deben ser consultados a la hora de tomar las decisiones.

En Tucumán tenemos enormes capacidades, no debemos menospreciarlas. Es es el único lugar donde se puede seguir una Maestría en Museología como estudio de posgrado. Sin embargo, a esos egresados no se los convoca. Errores se cometen en el Louvre o en el MOMA... En Buenos Aires, en Córdoba o en cualquier otro lugar del país los museos sufren robos o incendios. Y otra cosa fundamental: al contrario de un profesional que debe venir a resolver problemas desde afuera, con todo lo que eso implica, aquí contamos con todo el tiempo y los recursos humanos para hacerlo.

"Imaginario tucumano y símbolo nacional"

Carlos Piñero

Museólogo-encargado del Museo Folklórico

No hay duda de que el hecho histórico sucedió en Tucumán; y no es menos cierto que las implicancias de lo acontecido parieron la figura de Nación. Es decir, configuró una identidad colectiva en la que cada uno reclama su vínculo de pertenencia a ese hito: la construcción del concepto es tan importante como la materialidad que lo corporiza y visibiliza.

En este sentido, el consenso en las decisiones museológicas y museográficas es determinante a la hora de construir un discurso de amplia representatividad.

La discusión de la administración nacional, provincial o mixta del Museo Casa Histórica de la Independencia está atravesada por distintas variables de análisis que van desde un sentimiento patriótico colectivo o de representación nacional, un reclamo genuino de identidad histórica/patrimonial provincial, hasta un compromiso de intereses de orden presupuestario.

Lo cierto es que la casa de Francisca Bazán de Laguna, antes de ser elegida para declarar la Independencia, era uno de los tantos espacios domésticos que se erigían en el Tucumán colonial. Era una casa tucumana. Lo sigue siendo. Forma parte del imaginario colectivo tucumano. El destino la ha transformado en un símbolo nacional.

"Muchas decisiones deben pasar por aquí"

Mercedes Aguirre

Arquitecta-directora de patrimonio de la provincia

Ambos Gobiernos, el nacional y el provincial, deben sumar las responsabilidades que tienen sobre el patrimonio histórico y aunar esfuerzos para mantenerlo.

Muchas veces me sorprendo cuando se toman decisiones a través de la Nación y no somos consultados. Ya nos ha pasado que la Casa tenía una esencia colonial norteña y se retiró ese esquema para pasar a ser un museo. Tal vez no debió haber sido tan radical el cambio. ¿Entonces qué sentimos los tucumanos? Que de repente ese museo puede estar aquí, o en Mendoza, o en Rosario. Mientras tanto hay personajes caros a nuestro sentimiento patriótico, como Bernabé Araóz, que ocupan lugares secundarios en la museografía. En Tucumán no sólo se declaró la Independencia, también sucedió todo lo que la hizo posible.

Las decisiones que se tomen en lo que respecta a la Casa tienen que pasar por el Gobierno de la Provincia, por la Comisión de Patrimonio, por la Dirección de Patrimonio, por la opinión de la UNT... Para eso estamos, no para recibir enlatados de los que no participamos. Tucumán es la ciudad histórica de todos los argentinos y para nosotros no es la Casita de Tucumán, sino la Casa de la Independencia.

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