Un debut “a lo naranja”

En su primer partido con la nueva camiseta Tucumán perdió dando una áspera batalla.

Un debut “a lo naranja”
08 Agosto 2021

Hablemos del partido bautismal de la naranja. 11 de agosto de 1971. Mucho público en la cancha del Lawn Tennis. Un rival de jerarquía, que mixturaba a los mejores rugbistas de las universidades de Oxford y Cambridge. Y Tucumán, capitaneado por Jorge Ghiringhelli y dirigido por Carlos de la Serna, con esa novedosa camiseta “desamarronada” y decidido a afrontar una compleja misión: equiparar la superioridad técnica de los ingleses.

Fue derrota por 21 a 9, al cabo de un duelo netamente favorable a los británicos. “Discontinuo, fuerte y por momentos mal intencionado, que a veces generó riñas sin consecuencias”. Así analizó el partido la crónica de LA GACETA, ponderando el corazón y la actitud de los tucumanos, atributos insuficientes frente a un adversario mucho más calificado. Lo llamativo, de tan acostumbrados que estamos al cabo de las cinco décadas que vinieron después, es releer esa cobertura periodística sin encontrar el naranja como sinónimo de Tucumán. Ese recurso fue apareciendo con los años, hasta naturalizarse en el lenguaje. Hoy es al revés: al decir naranja ya no hace falta aclarar que se trata de Tucumán.

Pero volvamos a aquella tarde en el parque 9 de Julio. Tucumán forma con Mario Vega; Carlos Cisint, Eduardo Grunauer, Héctor Odstrcil y Juan Rojas; Carlos Rojas y Alberto Nieva; Julio Bach, Jorge Ghiringhelli (capitán) y Franco Veglia; Julio Iramain y Hugo Ferrari; Julio Olmos (subcapitán), Mariano Iramain y Ernesto Pérez. La referencia previa no es alentadora: cinco años antes, en agosto de 1966, el seleccionado había caído ante los Gazelles sudafricanos por 80 a 3. El único sobreviviente de aquel equipo es el capitán Ghiringhelli. Pero muchas lecciones recibidas durante aquel durísimo debut internacional se han aprendido y Oxford-Cambridge lo comprueba.

El primer tiempo es, dentro de todo, bastante parejo. Al menos en el marcador parcial: 10 a 3 (tries de Stephen James y R.O. Jones, contra un penal de Rojas; son épocas en las que el try convertido valía cinco puntos). La segunda parte es toda de Oxford-Cambridge, aunque en los instantes iniciales Julio Bach estuvo a punto de aprovechar un error del fullback inglés y casi anota volando sobre el in-goal. Después la visita marca distancias y aumenta con tries de R.O. Jones y Peter Phillips (2). Tucumán, por su parte, se da el gusto de sumar un try cuando el medio scrum Alberto Nieva -uno de los mejores del equipo- recibe la habilitación de Ernesto Pérez y apoya casi bajo los palos. Otro penal de Rojas decora el resultado.

En pleno fragor, durante el segundo tiempo, se da la particularidad de que el árbitro porteño Armando Zungri sale lesionado, así que ingresa a dirigir el inglés John Johnson.

“El equipo visitante mostró cualidades que lo hicieron erigirse en justo ganador”, detalló LA GACETA, elogiando sobre todo la prolijidad del line y del scrum inglés. La crónica castigó los errores de los tres cuartos tucumanos y sentenció: “el trémite deslucido del encuentro, que posiblemente haya dejado disconformes a muchos espectadores”.

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios