KABUL, Afganistán.- Decenas de mujeres salieron a las calles en la ciudad de Herat, en el oeste de Afganistán, para protestar contra los talibanes, exigirles que les devuelvan sus derechos políticos, como el de participar en el futuro gobierno, en cargos significativos. La manifestación duró varias horas y fue organizada por funcionarias de gobierno y activistas por los derechos de las mujeres,
La protesta se realizó mientras los talibanes tratan de formar un gobierno que, anticiparon, “podría no tener mujeres”.
Se trata de un desafío inédito desde que el grupo fundamentalista islámico llegó al poder. Los talibanes prometieron que permitirán el trabajo femenino “dentro de los límites del islam”, aclaración que trae sospechas porque ellos hacen una interpretación fanática y radicalizada del Corán, que la mayoría de los musulmanes repudia.
El número dos de la oficina talibán en Doha, Inayatulhaq Yasini, dijo a la BBC que las mujeres “tienen derecho a estar” en el gobierno que se está negociando, aunque dio a entender que su presencia podría ser testimonial y admitió que los ministerios estarían encabezados sólo por hombres.
Las manifestantes recuerdan cómo afectó a las mujeres el régimen que gobernó entre 1996 y 2001 y durante el cual fueron recluidas en el interior del hogar, se les prohibió estudiar y se les obligó a cubrirse de pies a cabeza para evitar ser vistas.
“Un gobierno sin la presencia de mujeres no durará y no será estable. No aceptamos un gobierno sin la participación de las mujeres y nos opondremos a él”, dijo Basira Taheri, activista y organizadora del evento.
“Las mujeres fueron marginadas por los talibanes desde que estos se apoderaron de las principales ciudades”, criticó Taheri.
En la protesta, que tuvo lugar frente a la oficina del gobernador de Herat, las manifestantes corearon consignas como “No tengas miedo, estamos unidas”, y pidieron a los talibanes que no devuelvan a las mujeres a la época de oscuridad de hace 20 años. “Es nuestro deber tener educación, trabajo y seguridad”, gritaron las manifestantes.
Pese a que los talibanes prometieron que su nuevo gobierno sería “inclusivo”, con representantes de todas las etnias y tribus del país, en el caso de las mujeres los líderes fundamentalistas han pedido esperar para ver cuáles serán las nuevas directrices, y que, mientras tanto, a las funcionarias se les pagará a domicilio.
En las dos últimas décadas hubo ministras, embajadoras, funcionarias de alto rango, pero ahora “¿dónde están las mujeres, no hay representación de las mujeres en sus reuniones”, preguntó Taheri, quien dijo que habrá más protestas y que mujeres de otras regiones de Afganistán ya la han contactado para seguir adelante con las exigencias. (Reuters-Especial)