Costocondritis: nuevo síntoma asociado a la variante Ómicron de coronavirus

Aunque los dolores desaparecen con los días, puede confundirse con un paro cardíaco.

LADO IZQUIERDO. Los dolores por costocondritis son más comunes en niños, adolescentes y en mujeres. LADO IZQUIERDO. Los dolores por costocondritis son más comunes en niños, adolescentes y en mujeres. FOTO ILUSTRATIVA / TOMADA DE LASEXTA.COM
07 Febrero 2022

A los síntomas ya conocidos por las anteriores variantes, desde el descubrimiento de Ómicron se fueron sumando dolencias y en los últimos días comenzó a hablarse de costocondritis, una inflamación que puede confundirse con un paro cardíaco.

Un grupo de investigadores del hospital pediátrico de la Universidad de Medicina John Hopkins, en Estados Unidos, reveló que la costocondritis es una “inflamación en los cartílagos que unen las costillas con el esternón” y produce “fuertes y dolorosas punzadas en el lado izquierdo del esternón”, por lo que suele confundirse con un paro cardíaco.

Además de los signos físicos ya conocidos como dolor de cabeza, dolor muscular, fatiga o cansancio extremo, dolor de garganta, mucosidad nasal y posible fiebre, se sumaron el dolor lumbar, la sudoración nocturna excesiva y los estornudos. Ahora, desde la Organización Mundial de la Salud advirtieron que la costocondritis es uno de los síntomas más graves de la covid y que requiere atención médica inmediata.

En el estudio destacaron que “es una de las causas más comunes de dolor en el pecho en niños y adolescentes” y afecta a más mujeres que a más hombres. Además, si bien genera un susto en quienes lo padecen, “suele ser inofensivo” y desaparece a los tres días, se informó en el portal de noticias TN.com.

¿Cuáles son los principales síntomas?

Dolor en el lado izquierdo del esternón.

Es agudo y punzante, da una sensación de presión.

Afecta a más de una costilla.

Se siente al respirar profundo o al toser.

¿Cómo se trata la costoccondritis?

Según la investigación, los dolores por costocondritis suelen desaparecer solos a los pocos días de iniciados.

En general, no requiere tratamiento, aunque alertan que de prolongarse, se recomienda consultar con un médico para descartar otras posibles patologías cardiovasculares.

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