Mientras en el ámbito político ya palpitan el 2023 electoral, las líneas internas del Frente de Todos (FdT) que responden al jefe de Estado, Alberto Fernández, y a la vicepresidenta, Cristina Kirchner, atraviesan un momento de máxima tensión, a partir de la aprobación del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para la reprogramación de la deuda externa argentina.
En la marcha del Día de la Memoria, ante los micrófonos, el diputado nacional Máximo Kirchner mantuvo el discurso de La Cámpora, al señalar que "cuando la gente es parte de un Gobierno, cuando lo banca, cuando hace lo que tiene que hacer, lo malo es menos malo y lo bueno es más bueno". "Es con la gente adentro, siempre", expresó el hijo de la titular del Senado de la Nación, aludiendo a las críticas de su espacio por el entendimiento con el organismo multilateral.
En paralelo, la diputada nacional Victoria Tolosa Paz, identificada con el albertismo, ratificó el mensaje del Presidente, quien en los últimos días -inclusive, en una visita reciente a Tucumán- había instado a "trabajar unidos", con el claro objetivo de aliviar tensiones en la coalición gobernante.
"Si sostenemos la unidad de nuestro frente, con las diferencias que han quedado expuestas, pero con una vocación muy fuerte de seguir construyendo el debate interno, lograremos lo que vinimos a hacer. La caída del desempleo al 7% es un ejemplo claro", afirmó Tolosa Paz a través de sus redes sociales.
En la marcha, la representante de Provincia de Buenos Aires estuvo junto a otros referentes y funcionarios del riñón de Alberto Fernández, como Daniel Filmus, Juan Zabaleta y Gabriela Cerruti.
El jueves, de hecho, Tolosa Paz había ponderado la figura de CFK -algo que había hecho el propio Presidente durante la semana-, al señalar que "Néstor (Kirchner) y Cristina lograron que nuestro país sea un ejemplo en el mundo en materia de Derechos Humanos", porque "hicieron de la memoria, verdad y justicia columnas del proyecto".