Violencia de género: ratificarán otra denuncia en contra de un condenado

Una de las víctimas del contador penado confirmó que seguirá con el caso. Si es condenado, tendrá que ir a la cárcel

TIEMPO DE ESPERA. En la fiscalía que conduce Gerardo Salas esperan a la víctima para que declare y presente nuevas pruebas en contra del acusado. TIEMPO DE ESPERA. En la fiscalía que conduce Gerardo Salas esperan a la víctima para que declare y presente nuevas pruebas en contra del acusado. LA GACETA / FOTO DE DIEGO ARÁOZ

En la audiencia donde un contador público nacional recibió la condena de tres años por amenazas en contra de su ex pareja y de haber incumplido una orden judicial surgió un dato relevante. El penado tuvo que cambiar el lugar de residencia que había fijado porque lo haría en la misma cuadra donde reside otra víctima que también consiguió que la Justicia dictara una prohibición de acercamiento en contra del mismo hombre. Y esa causa, que estaba paralizada, se reactivará en las próximas horas por iniciativa de la denunciante.

En marzo, V. (su nombre se mantiene en reserva para preservar su identidad, tal como disponen las normas), una profesional que había iniciado una relación con Carlos Martín Naufe, denunció a su ex pareja por amenazas en la Oficina de Violencia Doméstica (OVD) de la Corte Suprema de Justicia. Los responsables de la repartición enviaron el expediente a la Unidad Fiscal de Violencia de Género II que conduce Gerardo Salas. En cuestión de horas, y ante la gravedad del caso, se dictó la medida de restricción. Pero no se hizo nada más porque la víctima no siguió con la causa.

Este caso se registró a principios de 2021 y se denunció este año. La demandante reconoció que lo hizo después de que V.G se presentara en la Justicia. Por su expediente, el contador público nacional recibió la condena. “Su actitud me dio fuerzas y por eso lo denuncié ante las autoridades”, reconoció V.

El acusado fue notificado de la nueva medida en su contra cuando se encontraba detenido con prisión preventiva por las amenazas y por haber desobedecido la orden judicial a favor de V.G. “Es evidente que no le importa nada. Sólo a él se le puede ocurrir fijar domicilio en la misma cuadra donde vive la víctima a la que no puede aproximarse a 250 metros. Es una prueba de que se sentía impune hasta cuando estaba por ser condenado”, explicó la abogada que inició el expediente que terminó con una pena a través de un juicio abreviado.

El detalle fue descubierto por la auxiliar Daniela Tomás Briz que, por orden del fiscal Ignacio López Bustos, rechazó la residencia que habían propuesto los defensores del acusado.

El expediente

“No sabía cuáles eran los pasos que debía dar”, explicó V. al confirmar que en las próximas horas presentará un escrito para que la causa avance. En su edición de ayer, LA GACETA, publicó el fragmento de una charla telefónica donde esta víctima es amenazada por el acusado cuando decidió ponerle punto final a la relación. “Lo tengo para presentar como prueba, pero también cuento con varias capturas de pantallas con los mensajes que recibía de él”, explicó la joven profesional en una entrevista con nuestro diario. La víctima, según trascendió, tuvo que abandonar el país por un tiempo por temor a su ex.

El fiscal Salas confirmó que la causa se encuentra en trámite. “Estamos esperando aclarar algunas imprecisiones para definir cómo se está desarrollando el expediente. Una vez que eso ocurra, definiremos cuáles son los pasos a seguir”, explicó el investigador. Al cierre de esta edición, se aguardaba que la denunciante designe una querellante y que se presente a declarar como víctima.

Si encuentran los elementos probatorios necesarios, se hará una audiencia para que se formulen nuevos cargos en contra. Hasta el momento, sólo existirían elementos para acusarlo de amenazas. Y si llegara a ser encontrado culpable, sumará otra condena y terminaría en el penal. Se unificarán las penas y superarás los tres años de condicionalidad, por lo que deberá cumplirla tras las rejas.

Alerta

Yanina Muñoz, vocera de Mujeres de la Matria Latinoamericana, no pudo ocultar su preocupación por el caso. “El caso V. es una prueba concreta de que hubo muchos avances, pero aún quedan cosas por coordinar. En este caso el acompañamiento de las víctimas que no reciben el asesoramiento sobre cómo deben actuar”, señaló.

La vocera del grupo que defiende los derechos de las mujeres consideró que se lograron numerosos avances. “Hemos avanzado en lo que se conocía como la zona crítica, es decir, lo que sucedía cuando una víctima se presentaba en una institución, de ahí la mandaban a otra y después a la otra. La coordinación ahora es mucho más aceitada”, indicó.

Muñoz también ponderó que debe considerarse muy importante la celeridad con la actúa la Justicia. “Gracias a la denuncia digital la intervención de la fiscalía es inmediata. También se avanzó muchísimo con el dictado de las medidas de restricciones y no se puede negar que las causas, con el nuevo código procesal penal, se cierran en meses. Pero no se debe descuidar la perspectiva de género en cada una de las sentencias”, destacó.

“Todos son avances muy importantes, pero todavía queda una materia pendiente: el acompañamiento a las víctimas. De nada sirven dictar interminables medidas de protección a favor de una persona si no puede estar tranquila porque sabe que el violento la violará una y dos veces. En esto se debe trabajar de manera urgente para acabar con esta situación”, concluyó la dirigente.

Cómo actuar

- Denunciar el caso en la comisaría más próxima.

- Hacer el acompañamiento de la demanda en la fiscalía que esté de turno,

- Solicitar la asistencia legal gratuita.

- Pedir apoyo en la familia para estar contenida.

- Exigir asistencia psicológica.

Balance: “Me siento extraña con lo que pasó”

“La verdad es que me siento extraña con lo que pasó. Por un lado creo que podría haber recibido una pena más dura, pero también considero que ahora tiene un antecedente y que eso lo hará pensar a la hora de actuar”, explicó V.G, a las 24 horas de que su ex pareja fuera condenada a tres años de pena condicional por amenazas y desobediencia judicial. “Durante todo el día recibí una impresionante cantidad de mensajes de apoyo y felicitándome por la valentía que tuve. Ahora queda, como se lo prometí, acompañar a V. en su proceso para que lo condenen por lo que él hizo”, añadió.

Comentarios