Romero, polémico en las redes: “El ser conocido no significa tener una buena imagen”

Alexandra Morales, directora de Meraki, y el docente Santiago Tomás González opinan sobre la exposición de Enrique Romero en la red social.

EN TIKTOK. Enrique Romero, subsecretario de Tránsito de la capital, interroga a un joven que al parecer no quería pagar por un viaje en taxi.  EN TIKTOK. Enrique Romero, subsecretario de Tránsito de la capital, interroga a un joven que al parecer no quería pagar por un viaje en taxi.

Un joven -en evidente estado de ebriedad- se apoya sobre un auto estacionado, con brazos cruzados, al ser retenido luego de que un taxista alegara que el chico no quería pagar por el viaje que realizó. Enrique Romero, subsecretario de Tránsito de San Miguel de Tucumán, es parte de la escena. Exige que termine de pagar y se ríe del estado del joven que se mantiene en silencio. “¿Cuánto tenés de plata ahí?”, le pregunta. No recibe respuesta e insiste: “¿Qué te han comido la lengua los ratones?”. Finalmente llega el padre y obliga a su hijo a subir al auto para encargarse de la situación. El video registrado en la vía pública tiene 4.077 “me gusta” en la cuenta de TikTok del funcionario.

Toda la escena parece tener poco que ver con un control vehicular. El problema se dio entre dos particulares por el pago de un servicio. Romero, sin embargo, se hizo presente con su equipo de trabajo mientras era filmado. “‘Figureti’ quiere salir en cualquier lado ya. Romero disimulá un poco”, escribió uno de los comentaristas. “¿Por qué lo firmaron? ¿Y Romero por qué se hace el vivo? Ese hombre está equivocado”, expresó otro.

“Tenemos que entender que dificilmente le traiga un rédito político”, dice Alexandra Morales, directora Ejecutiva de la consultora política Meraki. No obstante -aclara- sí puede darle más visibilización; es decir que está haciendo lo que ella llama “campaña de notoriedad”.

“Lo que se busca es posicionar y exponer a un candidato para que haya un mayor número de personas que lo puedan reconocer sin la intencionalidad de ganar”, explica.

Si Romero busca posicionarse dentro del espectro de posibles candidatos -dice Morales- esta tampoco sería la forma adecuada para hacerlo. “Aunque probablemente sí podríamos verlo, a largo plazo, acompañando a Germán Alfaro en algún acople o sistema que pueda potenciar la elección del intendente, pero no creo que lo pueda perfilar a él como candidato”, dice la especialista. Y remata: “que tenga mayor visibilidad y la gente lo reconozca no significa que la gente lo vaya a votar. El ser conocido no significa tener una buena imagen”.

Santiago Tomás González, director de la carrera de Ciencias Políticas de la Universidad del Norte Santo Tomás de Aquino (Unsta), coincide con Morales sobre el conocimiento que la gente tiene sobre él a partir del uso de TikTok, algo que no necesariamente lo transforma en potencial candidato.

“Justamente al ser informal él se muestra como es realmente, de forma natural. Sirve como publicidad porque el público y los medios hablan (ya sea bien o mal), toman conocimiento de su persona. Es un estilo particular que lo termina identificando, la mayoría de la gente sabe quién es el subsecretario de Tránsito. De ahí que se traduzca en votos es otro cantar, muchos seguidores no significan igual cantidad de votos”, indica.

“Una campaña por redes tendría que ser más prolija y, en lo personal, no lo veo así. No creo tampoco que esté exclusivamente enfocado en buscar el voto joven el hecho de usar TikTok porque su uso ya está generalizado”, agrega.

Los fenómenos políticos que ganan mayor notoriedad a través de un uso particular de las redes, en las que muestran una actitud agresiva e imponente, crecieron en los últimos años apoyados -al parecer- por un sector en particular de la sociedad. “Se puede suponer que su idea es ser disruptivo y buscar un sector electoral que pueda estar en descontento con el descontrol de tránsito en la ciudad”, explica el politólogo. Y, respecto del tipo de contenido en particular que sube Romero a TikTok, añade: “particularmente no estoy de acuerdo con la burla o ridiculización pública hacia otra persona. Sí creo que los mejores remedios son sanciones económicas por las faltas de tránsito”.

El tránsito de la capital tucumana, mientras tanto, es cada día más desordenado. Un servicio de colectivos urbanos al borde del paro; ingresos a la ciudad en mal estado o escasos; el tránsito colapsado; calles cortadas; incluso desplazarse en vehículos pequeños es una travesía que requiere la destreza de esquivar pozos, peatones y vehículos de mayor porte. Se podrían enumerar más dificultades, pero las mencionadas ya son ilustrativas. Para moverse de un punto a otro dentro de la provincia, entonces, es fundamental armarse de paciencia y saber que llegar a destino no será tarea sencilla.

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