Tras el intento de magnicidio, Cristina comenzó a movilizarse en un auto blindado

El vehículo, un Ford Mondeo color negro, fue cedido por el presidente Alberto Fernández.

Foto tomada de: ámbito.com. Foto tomada de: ámbito.com.
03 Septiembre 2022

La vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, comenzó a utilizar un auto blindado después del atentado que sufrió el jueves pasado en la puerta de su casa, en el barrio porteño de Recoleta.

El vehículo es un Ford Mondeo de color negro, que forma parte de la flota presidencial. Según un informe del diario Clarín, en la Casa Rosada hay dos autos blindados que el Presidente no usa.

Por ese motivo, en las charlas que mantuvieron esta semana, Alberto Fernández le cedió ese auto para incrementar la seguridad de la vicepresidenta, tras el ataque sufrido cuando ingresaba a su departamento .

Así, rápidamente se acondicionó el vehículo, que se vio cuando este viernes, Cristina se retiró de su departamento con destino desconocido.

Cabe recordar, que la titular de la Cámara de Senadores  utilizaba autos blindados durante su Presidencia (2007 - 2015). 

Tras el intento de magnicidio, Cristina comenzó a movilizarse en un auto blindado

Intento de magnicidio

El jueves pasado, un hombre armado intentó asesinar a Cristina Fernández de Kirchner en las afueras de su domicilio, ubicado en Juncal y Uruguay, en el barrio porteño de Recoleta.

El sujeto, identificado como Sabag Montiel,  fue reducido de inmediato tras la intervención de los custodios y de los militantes que se percataron de lo ocurrido.

Cristina no advirtió que el atacante le apuntó con un arma

Ayer la vicepresidenta declaró ante la jueza María Eugenia Capuchetti y el fiscal Carlos Rívolo, quienes están a cargo de la investigación, y explicó que no se dio cuenta de que un hombre le había apuntado a la cara y le había gatillado el arma a pocos centímetros de distancia.

Empuñando un arma con su mano izquierda, el agresor se abrió camino entre cientos de militantes y quedó a centímetros de la presidenta del Senado. Apuntó a su cara y, sin mediar palabras, gatilló dos veces contra ella, pero el disparo no salió.

Según trascendió, Cristina se limitó a relatar ante la jueza y el fiscal los hechos que había vivido de la noche anterior. La audiencia fue breve, sin apreciaciones políticas ni pedidos de su parte, consignó el diario La Nación. Tampoco pidió por el momento ser querellante en la causa, condición que la habilitaría a acceder al expediente, solicitar medidas de prueba y apelar decisiones judiciales.

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