Netflix planea comenzar a cobrar las cuentas compartidas a principios de 2023, un movimiento que anticipó pese a ser consciente de que no gustará a los usuarios de la plataforma.
Las cuentas compartidas se han convertido en un problema para Netflix. Se trata de una practica por la que un usuario paga una suscripción y da acceso a ella a otras personas cercanas, con quienes comparte los costes.
A lo largo de este año la compañía ha anunciado e introducido distintas medidas que anticiparon el fin de las cuentas compartidas, como un nuevo plan de suscripción más asequible con anuncios, la posibilidad de transferir un perfil a una nueva cuenta o cobrar un extra al titular por cada miembro adicional que la use a modo de subcuentas, modalidad conocida como “Agregar una casa”.
La compañía probó esta última opción entre agosto y octubre en nuestro país, pero decidió suspender ante el enojo que provocó en sus clientes.
Según informó The Wall Street Journal, Netflix volverá el próximo año a pedir a las personas que comparten una cuenta que paguen para seguir accediendo a los contenido. No obstante, la compañía es consciente de que los usuarios no estarán conformes con el cambio.