Luis Medina Ruiz, en Panorama Tucumano: “Hay que aniquilar al mosquito”

Las acciones preventivas de la ciudadanía impactan positivamente si no en todas, con seguridad en la mayoría de las enfermedades conocidas. Pero en el caso del dengue resultan imprescindibles. Lo resaltó el ministro de Salud de la provincia, Luis Medina Ruiz, en varios pasajes de la entrevista que concedió ayer al conductor de Panorama Tucumano -la nave insignia de LGPlay-, Federico van Mameren.

El funcionario insistió muchas veces en que la población debe declararle la guerra al insecto vector, el mosquito aedes aegypti, mediante el descacharramiento, mediante el desmalezamiento puertas adentro de las casas y en los lotes privados, y mediante el uso de repelentes.

Aun en medio de esta epidemia, que calificó como la peor en la historia de la provincia, Medina Ruiz se mostró tranquilo. Dijo que el Sistema Provincial de Salud (Siprosa) está preparado, y afirmó que la situación no los sorprendió. “Lo estábamos esperando. Nosotros habitualmente monitoreamos; y veíamos qué estaba pasando en la región, en el mundo. Había una gran presión epidemiológica en Brasil, en Paraguay, en Bolivia, en el norte de Salta, debido a la circulación de personas”, explicó.

Añadió que las autoridades del Siprosa estaban esperando que la enfermedad llegue. “Por eso nunca dejamos de hacer los controles y las acciones en el terreno; de ir a cada barrio y a cada rincón de la provincia. Todos los viernes de 2020, de 2021, de 2022 y de este año nunca detuvimos las acciones para erradicar los reservorios de mosquitos, que es la gran tarea”, dijo.

Más allá de los trabajos, remarcó que a la presión epidemiológica mencionada se le sumaron los efectos del cambio climático, con un calor intenso hasta entrado el otoño, lo que generó un caldo de cultivo ideal. “Solo faltaba que alguien entre con dengue; y entró por Lules. Lamentablemente la consulta fue tardía, porque cuando uno puede localizar el primer paciente puede tomar acciones con anterioridad”, indicó.

Medina Ruiz destacó que una vez que la persona siente los síntomas -dolor de cuerpo, de cabeza, fiebre de 38° C o superior, sarpullido, vómitos y diarrea, entre otros- se debe colocar inmediatamente repelente -estos duran entre seis y ocho horas- y, luego de la consulta, aislarse incluso de su familia. No porque el dengue se contagie de persona a persona; sino porque un mosquito que pique a una persona infectada estará llevando el virus consigo, y lo introducirá en la siguiente persona que pique. “Si una persona está afiebrada y no consulta, y va a trabajar o a una reunión social, puede generar un brote epidémico si un mosquito la pica. Hay que recordar que este puede volar hasta 200 metros; y aunque no llega muy alto, puede subir a un edificio por el ascensor, con una persona”, señaló.

Puntualizó que actualmente la zona más complicada de la provincia es San Miguel de Tucumán. En especial, la zona sur. “Sobre todo pasando la (avenida) Independencia, a orillas canal; toda esa zona presenta muchas condiciones para que el mosquito sobreviva”, indicó el funcionario.

Repitió que desde el Ministerio no se dejaron de llevar adelante ninguna de las acciones normales para combatir el dengue. “Pero se dan ciertas circunstancias: los criaderos están dentro de las casas. El personal de salud pide permiso; y cuando le permiten entrar sacamos los recipientes; y le explicamos a la gente que hay que cambiarle el agua al bebederos de la mascota, que hay que quitar el agua que se acumula en las macetas; incluso en una tapita de gaseosa. El descacharreo, la limpieza de las piletas, es la acción más efectiva. Y luego sirve la fumigación afuera. Este es un trabajo entre todos: Gobierno, municipios y la ciudadanía”, dijo.

Contó que, en particular, la enfermedad produce una deshidratación. De allí que una de las acciones que se llevan a cabo en los centros de salud sea la de colocar sueros al paciente. “En el caso de la covid-19 preparábamos las Unidades de Terapia Intensiva (UTI). Con el dengue armamos estaciones de hidratación. Esta enfermedad produce deshidratación, por vómitos, por diarrea, porque el paciente siente poco apetito y poca sed. Entonces, el tratamiento es una hidratación adecuada. Recomendamos que tomen agua”, dijo el ministro.

Precisó, además, que el dengue que ingresó ahora a la región es el 2. “Hay cuatro serotipos; en 2020 tuvimos el 1 y el 4; ahora, el 2.. Como es nuevo, todos somos susceptibles de enfermarnos; y este virus ataca con más intensidad de síntomas”, precisó.

Aprovechó, nuevamente, para insistir con lo que considera la única estrategia efectiva. “Hay que aniquilar al mosquito; sacarlo de alrededor de nuestra casa. De las enfermedades trasmitidas por mosquitos, el dengue es la que más muerte ocasiona en el mundo. Debemos eliminar los reservorios y los criaderos, en cada casa. El mosquito pone huevos por encima de la superficie del agua; esta se evapora, pero los huevos quedan, y las larvas pueden desarrollarse aunque pase un año”, puntualizó Medina Ruiz.

Cerró la entrevista con una visión optimista. “Tenemos buenas perspectivas; el sistema está preparado, tenemos claro lo que debemos hacer, entre todos”, dijo.