Sudamericano Sub 17: Paraguay retrasó la clasificación argentina

El seleccionado “albiceleste” fue muy superior y lo intentó por todos lados, pero no pudo pasar del 0-0 por el arquero Insfrán

GAMBETA. Benjamín Acosta intenta desbordar a Balbuena, uno de los más firmes del fondo paraguayo. El de Lanús fue uno de los más activos adelante, y casi marca un gol de chilena. Se fue por poco. twitter @Argentina GAMBETA. Benjamín Acosta intenta desbordar a Balbuena, uno de los más firmes del fondo paraguayo. El de Lanús fue uno de los más activos adelante, y casi marca un gol de chilena. Se fue por poco. twitter @Argentina

Que Argentina no esté ya clasificada al Mundial Sub 17 y deba esperar hasta el jueves tiene un culpable con nombre y apellido: Facundo Insfrán Lirussi. El arquero de Paraguay le sacó todas, pero todas a los pibes de Diego Placente. Y eso que Argentina lo buscó por todos lados a lo largo de los 94 minutos de juego, pero no hubo caso: el juvenil guardameta de Olimpia, con su 1,80 metro de estatura, se transformó en una especie de “Dibu” Martínez y tapó todo, por arriba, por abajo, con las manos y los pies. Poco hay que reprocharle a los jugadores argentinos en la definición; si el partido terminó 0-0 fue por el muchacho vestido de amarillo.

Luego de haber ganado en sus dos primeras presentaciones en el hexagonal final (2-0 a Chile y 2-1 a Venezuela), Argentina llegaba la tercera fecha igualado en el primer puesto con Brasil y Ecuador, y con la chance de ser el primero en asegurar su clasificación al Mundial. Para ello debía derrotar a Paraguay, el único rival de su grupo al que no había podido vencer en la primera fase (fue 1-1). Y aunque el equipo guaraní venía de perder a manos de Ecuador y Brasil, se dio maña para complicarle la tarde al seleccionado “albiceleste”.

Primero, con un planteo que el DT Aldo Bobadilla había dispuesto para frenar las carreras al ataque de los laterales argentinos, armas clave en el esquema de Placente. Argentina, con varias modificaciones respecto del triunfo sobre la “Vinotinto”, no resintió su funcionamiento y en los primeros 10 minutos ya había hecho figura a Insfrán. Alejo Sarco y Maximiliano Porcel fueron los que mayor peligro llevaron, aunque en esa lluvia de intentos sobre el arco paraguayo también hubo participación de Benjamín Acosta (incluyendo una chilena en el segundo tiempo que se fue besando el palo). En el medio, impecable lo de Kevin Gutiérrez.

Aunque la sensación de que el gol argentino estaba al caer era constante, Placente decidió cortar por lo sano y mandar a la cancha a la artillería pesada, con el objetivo de asegurar la clasificación cuanto antes y afrontar los últimos dos partidos (vs Ecuador y Brasil) con mayor tranquilidad. Junto a Claudio Echeverri -el ancho de espadas- ingresó Santiago López (segundo goleador del equipo detrás del “diablito”) y poco después lo hizo el delantero de River, Agustín Ruberto.

En la primera jugada, Echeverri demostró por qué es el mejor dentro de un plantel rebosante de talento: encaró por el medio, gambeteó a dos rivales, abrió para López y buscó la definición, que se le fue por poco. Minutos después, tuvo su revancha y definió esquinado, pero el árbitro invalidó el gol porque la pelota le había rebotado en la mano al jugador antes del remate.

Lo siguió buscando el prometedor 10 de River, pero cuando no definió desviado se encontró con el intratable Insfrán. O con el travesaño, como en ese gran tiro libre enroscado al que el 1 paraguayo ya no llegaba.

Argentina quedó con siete puntos, a seis del quinto puesto que lo dejaría afuera (hoy ocupado por Paraguay), cuando quedan igual cantidad de puntos en juego. Por eso, deberá esperar hasta el jueves a la noche, cuando enfrente a Ecuador, para sellar su clasificación a la Copa del Mundo. Cabe recordar que entrarán los cuatro mejores del hexagonal. Por ahora, el cuarto es Venezuela, que le ganó 2-0 a Chile.

La sede sigue siendo una incógnita

Mientras los seleccionados sudamericanos continúan en la lucha por la clasificación, el Mundial Sub 17 aún no tiene sede confirmada por la FIFA. Perú, el anfitrión original, fue despojado de la organización debido a la incapacidad del país de terminar a tiempo con la infraestructura necesaria para albergar el torneo. Si bien se había mencionado a Colombia como posible sede, fue descartada, por lo que se baraja la opción de Qatar debido a su exitosa organización del Mundial de mayores.

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