El domingo a la siesta dos niños de ocho y 11 años fueron atacados por dos motochorros para robarles sus bicicletas en Yerba Buena. Uno de los chicos fue arrastrado por la calle pero no sufrió heridas graves y se pudo recuperar el rodado porque una automovilista persiguió a los ladrones hasta que arrojaron la bicicleta.
El hecho se conoció cuando el padre de los niños difundió una publicación en Facebook y un audio de WhatsApp relatando la situación. Según su explicación, el domingo alrededor de las 16.30 y las 17, los niños salieron a andar en bicicleta por la zona del country Marcos Paz, mientras él los vigilaba desde su caballo a dos cuadras de distancia. A la altura de la calle La Madrid al 1.400 dos hombres que circulaban en una motocicleta abordaron a sus hijos y los agredieron para quitarles uno de los rodados. “Al nene de 11 lo arrastraron de una vereda hacia la otra; gracias a Dios los chicos están bien y no tienen nada más que un raspón, pero sí están asustados por el mal momento que vivieron”, manifestó el padre en el audio compartido.
Gracias a una automovilista que vio lo que pasaba por ahí y empezó a perseguir y a filmar a los ladrones, se logró recuperar la bicicleta pero los agresores huyeron.
Hasta ayer a la mañana no había una denuncia oficial realizada en la comisaría de Yerba Buena. “Nosotros nos enteramos porque al hacerse viral la publicación de Facebook y por un audio que comenzó a circular por WhatsApp, el jefe de la Unidad Regional Norte, Joaquín Girbaux, al igual que el jefe de zona, el oficial Walter Colombres, nos dieron aviso de lo sucedido y actuamos de oficio”, le informó a LA GACETA el comisario principal Osvaldo Lazarte. Finalmente, tras varias insistencias, el padre de los niños se acercó a la dependencia ayer por la tarde para denunciar lo sucedido.
“Nosotros por oficio realizamos un relevamiento en el lugar de los hechos y por supuestas vías de escape, solicitamos los videos de las cámaras de seguridad de las inmediaciones y obtuvimos colaboración del GUM y del secretario de Seguridad de Yerba Buena, Mauricio Argiró”, detalló Leandro Molina, el oficial que estuvo a cargo de las actividades.
Los oficiales informaron que recibieron el video de una vecina donde se visualiza a los ladrones circulando en su vehículo, pero al ser una imagen de baja calidad todavía no se los pudo identificar. Sin embargo dijeron que apenas tengan datos concretos solicitarán medidas judiciales para su aprehensión, el secuestro de la moto y allanamiento.
Este caso no fue el único que se dio por la zona en los últimos días, donde un menor estuvo en peligro. Angie, la dueña de una verdulería, le contó a LA GACETA que hace unas semanas, un niño de 10 años fue asaltado cuando volvía del colegio.
“Fue como a las 19, ya estaba oscuro y justo fue en una calle sin luz; un hombre pasó caminando y le arrancó la mochila al nene; por suerte no lo lastimó, pero esa esquina es super peligrosa y desolada, no hay nadie cuidando por estas cuadras”. Por su parte, Ernesto, empleado de una gomería, dijo que la zona suele ser tranquila, pero que el principal problema son las condiciones en las que están las calles y la oscuridad que reina en ellas durante la noche.
“Acá, más que nada, te asaltan cuando venís caminando y ya está todo oscuro; entre que no hay mucho movimiento, las calles no tienen pavimento y a veces no hay luz te tenés que ir fijando por dónde vas porque, si no, te regalás”, describió. (Producción periodística: Micaela Pinna Otero)
Triste Recuerdo: el papá de los niños recordó a Valentín Villegas
En el audio que compartió, hizo mención al asesinato de Valentín Villegas, el adolescente que fue herido de muerte de una puñalada en la zona del corazón, el 21 de octubre de 2018, por evitar que un motoarrebatador asaltara a una amiga. “Les cuento para que vean lo peligroso que está, más que nada, la zona; la verdad que hoy me vino a la cabeza una imagen muy fea; cuando le quitaron la vida a Valentín en la calle San Martín al 1.300, una tarde de domingo como la de hoy”. Ambos casos ocurrieron a menos de diez cuadras de distancia.