San Martín de Tucumán: Frontini no negocia ni intensidad ni agresividad

El flamante DT del “santo” suele apostar por equipos que atacan con mucha gente, sin descuidar la solidez del medio hacia atrás

OBJETIVO. A Frontini le gustó el nivel “santo” en los últimos partidos. “Debemos sumarle volumen de juego”, dijo.  OBJETIVO. A Frontini le gustó el nivel “santo” en los últimos partidos. “Debemos sumarle volumen de juego”, dijo.

Cuando la directiva “santa” confirmó la llegada de Pablo Frontini, muchos hinchas se acordaron del golpe que el Defensores de Belgrano dirigido por el ex defensor de River le dio al San Martín de Pablo De Muner en el Reducido de la temporada pasada. Aquella noche, el “dragón” le dio una lección al “santo”. Sin embargo, Frontini lleva sólo tres años como entrenador y en La Ciudadela muchos se preguntan qué sello o qué marca distintiva puede llegar a tener el equipo durante el nuevo proceso.

“La agresividad y la intensidad son cosas que no podemos perder. En los últimos dos partidos el equipo tuvo esas virtudes, por lo que debemos sostenerlas. Mi idea es atacar con mucha gente y que los laterales sean muy ofensivos; pero la agresividad y la intensidad deben estar en todo momento”, le comentó el DT a LA GACETA. Justamente, esos aspectos fueron puntos claves durante sus anteriores procesos como director técnico.

Frontini prácticamente se sacó los botines para calzarse el buzo de entrenador. En 2019 dejó la práctica profesional y a los pocos meses tomó el mando de San Telmo, club con el que consiguió el ascenso a la Primera Nacional y llegó a cuartos de final de la Copa Argentina. “Es un técnico trabajador que supo potenciar a un plantel que no tenía grandes figuras. Logró darle forma y consiguió una estructura sólida y un equipo protagonista y contundente”, explica Daniel Millares, relator de TyC Sports Play que sigue de cerca el ascenso bonaerense. “Durante ese proceso utilizó el 4-2-3-1, el 4-3-1-2 y el 4-4-2. No se casó con un solo sistema; fue cambiando de acuerdo a las necesidades y a las conveniencias”, agrega Millares.

Más allá de que en San Telmo logró un ascenso y tuvo un rendimiento en la Copa que quedará en la historia en la Isla Maciel, el paso por Defensores de Belgrano le permitió trascender fronteras y que su nombre comenzara a ser relacionados con equipos con más trayectoria en la segunda categoría de nuestro fútbol.

“Frontini es un entrenador muy ofensivo, muy vertical, muy de manejar la pelota. Es verdad que depende de los intérpretes, pero en Defensores armó un equipo que supo ser protagonista en todas las canchas. Ese Defensores jugaba 4-4-2 o 4-1-3-2 y comenzó a destacarse cuando sumó a Nicolás Benegas y a Ezequiel Aguirre”, dice Mariano de Luzuriaga, panelista en el programa “El Sueño del Ascenso”, que va por América Sports y relator oficial del “dragón”. “Aquel Defensores se construyó a partir de la solidez defensiva. Marcaba en zona y tenía laterales que pasaban constantemente al ataque, generando superioridad en ese sector. Además, Frontini trabajó muy bien las jugadas de pelota parada y esa fue otra de las armas que tuvo el equipo durante esa campaña”.

En el inicio de este año estuvo cerca de cerrar su llegada a Quilmes; pero Frontini terminó recalando en All Boys; en donde no logró encontrar casi nunca el equipo y se fue luego de la fecha 10.

“Nunca mantuvo el arco en cero y para colmo muchas veces que se había puesto en ventaja no pudo sostener el resultado. Además, bajaba mucho el nivel en los segundos tiempos”, detalla Luis Merler, periodista que sigue la campaña del “albo”. “Igualmente, son cosas que All Boys todavía sufre, pese de que ya tuvo cambio de entrenador”, añade.

“El piso tiene que ser lo que mostró San Martín contra Morón y Alvarado. A eso le tenemos que sumar volumen de juego”, remata Frontini, que pretende un equipo intenso, agresivo y ganador.

En Mendoza será un hincha más

Pablo Frontini retornó a Buenos Aires para solucionar cuestiones relacionadas con la mudanza a Tucumán. El domingo por la mañana volará rumbo a Mendoza para presenciar el partido contra Gimnasia, y desde ahí volverá junto a la delegación. “Como había pocos días entre los dos partidos y ya estaba definido el cronograma de trabajo semanal no nos parecía lógico asumir de inmediato”, explicó el entrenador.

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