El Gobierno avanzó con la desregulación del comercio exterior de alimentos al oficializar la normativa en el Boletín Oficial, en un intento por sostener la desaceleración inflacionaria, que en diciembre se ubicó en 2,7%. La medida busca ampliar la disponibilidad de productos importados en las góndolas, incluyendo algunos que forman parte de la canasta básica con la que el INDEC elabora el Índice de Precios al Consumidor (IPC). Sin embargo, hay sectores que temen por la industria nacional y por posibles problemas que esta medida podría tener en la salud de muchos argentinos.

Desde este jueves, la ANMAT habilitó nuevos procedimientos para importar alimentos destinados a la venta, uso industrial, muestras sin valor comercial, envases y utensilios en contacto con alimentos. También estableció lineamientos para la exportación, si el país de destino los exige. Con estos cambios, ya no será necesario un control previo del organismo, sino que bastará con una declaración jurada de importación. 

“Son procedimientos y reglamentaciones que permiten importar y exportar alimentos. ANMAT se reserva el derecho de inspeccionar contenedores y, si se detectan irregularidades, no se autoriza el ingreso”, indicaron fuentes oficiales al diario Clarín.

En confrontación con la medida, Javier Rodríguez, ministro de Desarrollo Agrario bonaerense y opositor al Gobierno de Javier Milei, advirtió en una entrevista con Página 12 que “se asume que hay países, como los de la Unión Europea o Estados Unidos, que por sus estándares darían cumplimiento a lo exigido por el Código Alimentario Argentino, y esto no es así”.

El funcionario ilustró la situación señalando que, según el Código Alimentario Argentino, el límite permitido es de 10 miligramos por kilo, mientras que en la Unión Europea y Estados Unidos se tolera hasta 20 miligramos por kilo. Como consecuencia, podrían ingresar al país productos importados etiquetados como libres de gluten, pero que no cumplirían con las normativas locales establecidas.

MENOS CONTROLES. Para agilizar la importación, el Gobierno habilitó al ANMAT a flexibilizar las inspecciones de productos fabricados en Estados Unidos y la UE. ARCHIVO LA GACETA / FOTO DE JOSÉ NUNO

La apuesta por la competencia para sostener la baja de inflación

El ministro de Economía, Luis Caputo, ya había reducido aranceles e impuestos a la importación de productos de consumo masivo para incentivar la caída de precios. Ahora, la flexibilización se da en un contexto de menores costos de importación, impulsados por la decisión de contener el valor del dólar. Desde el lunes, el Banco Central disminuirá aún más el ritmo de devaluación (crawling peg), del 2% al 1% mensual.

Según el INDEC, la importación de alimentos y bebidas esenciales creció un 8,2% interanual en 2024, mientras que la de productos elaborados para el hogar cayó un 4,8%. No obstante, en diciembre hubo una fuerte aceleración en ambos rubros, con aumentos interanuales del 80,6% y 51,4%, respectivamente, favorecidos por la flexibilización en los pagos de importaciones.

En el sector minorista, algunas cadenas de supermercados ya comenzaron a importar productos como fideos y lácteos, mientras que otras optaron por artículos de bazar. “Si los precios son competitivos, van a ingresar más productos. El comentario de que el pan lactal era más caro que en Mónaco ayudó a corregir precios. Esto ya se nota en pastas secas y cervezas”, señalaron al diario Clarín fuentes del sector.

El año pasado, la Coordinadora de Industrias de Productos Alimenticios (Copal) expresó preocupación por una posible “apertura indiscriminada”. Sin embargo, actualmente algunos fabricantes se muestran más confiados, asegurando que son “altamente competitivos” y que no dependen del proteccionismo, a diferencia de otros sectores industriales. Además, la medida agilizará exportaciones y reducirá costos de materias primas, como la leche utilizada por los productores tamberos.

Detalles de la medida anunciada por decreto

La semana pasada, el Gobierno publicó el decreto 35/25 para eliminar restricciones al comercio exterior de alimentos, quedando pendiente la reglamentación de ANMAT.

“Los productos importados de los países listados en el ANEXO III (IF-2024-129062333-APN-SSE#MDYTE) al Decreto 2126/71 y sus modificaciones podrán ingresar al país y comercializarse mediante una declaración jurada y el correspondiente 'Aviso de Importación' a través de la plataforma TAD”, informó el organismo.

La normativa incluye a países como Australia, Canadá, Suiza, Estados Unidos, Nueva Zelanda, Israel, Japón, Reino Unido e Irlanda del Norte, así como la Unión Europea. También prevé la incorporación de naciones con las que ANMAT firme Acuerdos de Reciprocidad en Materia Higiénico-Sanitaria, previa evaluación de cada país de origen.

La disposición abarca alimentos, condimentos, bebidas y sus materias primas, así como aditivos alimentarios, siempre que cumplan con las normativas del Código Alimentario Argentino.